POR KIMBERLY LÓPEZ
klopez@lahora.com.gt

Hasta ahora son 24 las personas desaparecidas en el derrumbe ocurrido en el relleno sanitario de la zona 3 capitalina. La incertidumbre de las cifras para contabilizar a las posibles víctimas y las condiciones en la que se encuentran las familias que trabajan dentro del relleno, es reflejo de la falta de control de seguridad, así como de oportunidades para los residentes de esa zona.

El vocero de la Municipalidad, Carlos Sandoval, reconoció ayer una incongruencia en la cantidad de personas desaparecidas y la que reflejaban los registros de ingreso al basurero. Esto, debido a la falta de controles adecuados en el ingreso y en la seguridad de las personas que laboran dentro del área.

Sandoval indicó que para ingresar al lugar las personas se identifican con un gafete para tener un registro de control. No obstante, el director de Obras Municipales, Álvaro Hugo Rodas, reconoció la necesidad de reforzar los protocolos, así como ampliar al personal de seguridad en el lugar.

Además, según la información de sobrevivientes y personas cercanas al lugar, la cifra real podría ser de 60 desaparecidos, aproximadamente. Sin embargo, esta información aún no se confirma porque continúa la búsqueda de personas.
Por otro lado, las condiciones poco dignas en las que cientos de familias que trabajan en actividades de recolección, clasificación de basura y reciclaje, son un ejemplo de las opciones por las que optan los guatemaltecos, frente a la falta de oportunidades.

En promedio, los ingreso de un recolector del relleno sanitario son de Q1 mil 200 al mes, según los propios trabajadores indican.

Según Luis Linares, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), la ocupación de guajero es la última oportunidad que tiene alguien en materia de trabajo y ocupación, tanto que en temporadas críticas para la economía aumenta el número de recolectores.

«La falta de oportunidades de empleo obliga a buscar alternativas, mientras se resuelve el problema de las necesidades lo que hay que mejorar es el control y delimitación de las áreas», asegura el experto.

REFLEJO DE LA POBREZA

La Encuesta Nacional de Condiciones de Vida 2014, presentada el pasado 10 de diciembre, por el Instituto Nacional de Estadística (INE), reflejó un incremento en el porcentaje de la población que vive en pobreza, ya que pasó de 51.2 por ciento en el 2006 a 59.3 por ciento el año pasado. Mientras que la población en pobreza extrema se elevó en 8 puntos porcentuales en los últimos ocho años.

Pese a que Guatemala es uno de los departamentos con menor índice de pobreza, con un 33.3 por ciento, y pobreza extrema en todo el país, las condiciones de vida en los alrededores del relleno sanitario son ejemplo de los escenarios capitalinos que enfrentan el problema de la pobreza.

Mientras tanto, las autoridades municipales aseguraron que durante los próximos días la búsqueda de personas continuará y ya se ha suspendido el ingreso de recolectores en el lugar.

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