0:00
0:00

No es algo nuevo

No es nada nueva esa relación en Guatemala desde antes de la independencia, pero adquiere su verdadero valor con la Constitución de 1879 y las reformas liberales que la precedieron en que se vuelve un mandato la obligatoriedad y gratuidad de la enseñanza primaria. Esta fue, sin embargo, más una declaración legal de intenciones que una implementación práctica e inmediata a nivel nacional. Para esta relación, el hito más significativo en el Siglo XX es la Constitución de 1945, emanada de la Revolución de Octubre, que estableció la educación primaria obligatoria y gratuita de forma más concreta y amplió y mejoró la atención a la salud. Este período de la Revolución de 1944-1954 fue crucial para el desarrollo de la educación pública y la salud.

 

Es a partir de la mitad del siglo XX (con retraso de siglos) cuando además dentro del plan educativo se reconoce con claridad operativa el papel estratégico que las escuelas podían desempeñar en la promoción y protección de la salud. Las escuelas pronto se convirtieron en línea de lucha contra las enfermedades infecciosas y en el centro para proporcionar no solo información teórica, sino una amplia gama de servicios sociales y de salud para niños y familias.

 

Salud y educación su convergencia

Con el cambio de décadas, los programas de salud escolar se han adaptado a las necesidades cambiantes de niños y adolescentes, pero también de los factores causales de las enfermedades. En la actualidad, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades del mundo desarrollado occidental y oriental, han señalado seis categorías de comportamiento como responsables del 70% de la mortalidad y morbilidad en adolescentes: lesiones intencionales y no intencionales, abuso de drogas y alcohol, enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados, enfermedades asociadas con el tabaquismo, enfermedades derivadas de la actividad física inadecuada y problemas de salud debidos a hábitos alimentarios inadecuados. Es raro que no añadan como factor fundamental la salud mental y a todo lo anterior, hay que añadir que casi todas las enfermedades crónicas que se manifiesta en la edad adulta y en la tercera edad, tienen su origen en la exposición temprana a factores de riesgo y la adopción de comportamientos no saludables durante estas etapas cruciales de desarrollo humano. Es decir, comportamientos a esas edades sientan las bases para las enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT) en la vida adulta, incluyendo enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y varios tipos de cáncer, enfermedades musculo-esqueléticas degenerativas y la salud mental. Veamos en un cuadro un resumen de ello.

Salud y educación su convergencia

Condiciones de hoy, amenazas de mañana 

En la niñez y la adolescencia nos podemos encontrar con problemas antropométricos como el peso, que determina un factor de riesgo directo para la diabetes tipo 2, la hipertensión y los problemas articulares. Falta de desarrollo osteomuscular y posibles defectos ya en esos tejidos. 

 

Pero mucho de ello viene dictado por Factores Ambientales y Socioeconómicos. Las amenazas del entorno pueden predisponer a enfermedades crónicas incluso antes de que se manifiesten los malos hábitos: 1º Contaminación del Aire: La exposición temprana a contaminantes se vincula con el desarrollo de asma y un mayor riesgo de enfermedades respiratorias y cardiovasculares crónicas en el futuro. 2º Condiciones Socioeconómicas Desfavorables: La pobreza y el acceso limitado a alimentos saludables y atención médica preventiva-curativa actúan como determinantes sociales de la salud que aumentan la vulnerabilidad a las ECNT. 3º Estrés y Adversidades en la Infancia (ACEs): Las experiencias adversas pueden afectar el desarrollo cerebral y hormonal, contribuyendo a problemas de salud mental crónicos y enfermedades metabólicas a largo plazo. 

 

Los problemas de salud mental que comienzan en la adolescencia (como la depresión y la ansiedad) no solo son ECNT en sí mismos, sino que también actúan como facilitadores de otros riesgos: A. Mayor Riesgo de Comportamientos No Saludables: Los jóvenes con problemas de salud mental son más propensos a consumir sustancias o a tener una alimentación deficiente y a accidentes. B. Impacto Fisiológico: El estrés crónico y la depresión están relacionados con la inflamación sistémica, un mecanismo subyacente de muchas enfermedades crónicas (cardiopatía, etc.).

 

Es ante estos últimos problemas en que el sistema educativo se vuelve importante no solo como un detector de riesgos y casos sino como un proceso preventivo.

 

Comportamiento educativo y salud

Se ha encontrado que un segmento significativo de la niñez y juventud del país corre el riesgo de abandonar la escuela debido a una amplia gama de problemas de salud y comportamiento; además, muchos niños carecen de acceso a atención primaria y preventiva básica.

Tasas de Deserción Escolar por Nivel (MINEDUC)

Tasas de Deserción Escolar por Nivel (MINEDUC)

Fuente: Anuario Estadístico (2022/2023) 

Y aunque la cobertura es alta en nivel primaria (90%) los que finalizan la primaria son entre 72-82%, en los otros dos niveles en uno la cobertura ronda el 50% y en el vocacional el 25%.  De tal manera que en muchos casos la asociación educación-salud está afectando ello y la capacidad educativa potencial para la enseñanza y aprendizaje de buenas prácticas de salud se ve limitada.

Debemos entender ante esa situación, que el trabajo es complejo y va más allá de darle alimentación y nutrición al estudiante. Eso es bueno, atrae al estudiante (aumenta coberturas) y a la vez evita deterioros a la salud del niño y el adolescente, pero no es suficiente y explico porque:

 

El concepto de salud escolar es amplio. La salud es más que simplemente la ausencia de enfermedad; la salud implica un funcionamiento y bienestar físico, mental, social y emocional óptimos y eso debe aprenderse y practicarse. Este es el verdadero espíritu de la salud escolar. En ello resulta de vital importancia y clave las escuelas para llegar a los niños y sus familias, combinando, de forma integrada y sistémica, la educación para la salud, la promoción de la salud y la prevención de enfermedades, y el acceso a servicios de salud.

 

El programa de salud escolar

Un buen programa de salud escolar es una forma prometedora de mejorar los resultados educativos (salud asociada a rendimiento y asistencia) y de salud de los estudiantes (la salud no es de un hoy, es también de un mañana) y de reducir los costos generales de la atención médica, al priorizar la prevención y promoción y el fácil acceso a la atención (a los factores de riesgo). 

El concepto de un programa integral de salud escolar (PSES) se propuso en la década de 1980 para abordar muchos de los problemas relacionados con salud de los niños y jóvenes de hoy y a lo largo de las décadas ha sufrido cambios.

En la actualidad el Programa de Salud Escolar (PSE) de Guatemala, tiene como objetivo principal proporcionar atención integral a los estudiantes del sector público. Su estructura actual se sustenta en una coordinación interinstitucional (MSPAS y Mineduc) y cubre una gama específica de atenciones de salud, con un fuerte enfoque en la prevención y la atención primaria.

Un programa integral de salud escolar es un conjunto integrado de estrategias, actividades y servicios planificados y secuenciales, afiliadas a la escuela, diseñados para promover el desarrollo físico, emocional, social y educativo óptimo de los estudiantes. Y el actual programa nacional en servicios se ha estructurado así:

Salud Preventiva y Control Biométrico
Salud Preventiva y Control Biométrico

En forma teórica, el programa cubre la atención de: 

Enfermedades comunes y de corta duración, como:

    • Infecciones respiratorias agudas (resfriados, gripes).
    • Infecciones gastrointestinales (diarrea).
  • Infecciones de la piel y otros padecimientos comunes.

 

Atención de Emergencias:

Accidentes: Cubre los gastos médicos derivados de accidentes ocurridos dentro de las instalaciones escolares o en actividades relacionadas con la escuela (dependiendo de la implementación específica del programa en el año).

Asistencia Funeraria:

El componente actual incluye un aporte económico para los gastos funerarios en caso de fallecimiento del estudiante.

Qué se expresa débil dentro del programa de salud escolar: áreas críticas de atención

Es muy asistencial y se ignora su cobertura real y eficiencia más allá de la alimentación escolar. 

En opinión de expertos, es importante considerar el problema de la salud escolar en tres componentes como crítica en cuanto a su organización y funcionamiento. 

El entorno escolar:

1º La falta de cobertura y verdadera atención al entorno físico: que implica un diseño adecuado del edificio, iluminación, agua, ventilación, seguridad, limpieza, ausencia de peligros ambientales que fomenten infecciones y discapacidades, políticas de transporte seguro y la implementación de planes de emergencia. 

2º Entorno político y administrativo: que consiste en políticas para promover la salud y reducir el estrés, y regulaciones que garantizan un entorno libre de tabaco, drogas, armas y violencia. Este aspecto carece de estudios serios y programas preventivos. 

3º Entorno psicosocial: que incluye una atmósfera de apoyo y de crianza, un entorno académico cooperativo escuela-autoridades-hogares, respeto por los derechos individuales y la responsabilidad social. No existen verdaderos planes ajustados a la epidemiología local o regional de atención-detección de riesgos, análisis y adecuaciones operativas.

4º Promoción de la salud para el personal (no existe información al respecto) y tampoco de la epidemiología que se da en este sector laboral ni en el IGSS ni en el Mineduc que sea pública. En ese sentido es difícil argumentar en este campo.  El IGSS ha señalado consistentemente que el sector público es uno de los segmentos con más bajas temporales de trabajadores. Los maestros del sector público (magisterio) representan una parte sustancial de este grupo, siendo una de las nóminas más grandes del Estado.

La educación

El programa contempla en ese sentido dos áreas: la educación física, que enseña los conocimientos y habilidades necesarios para la aptitud física durante toda la vida; la educación para la salud, que aborda las dimensiones físicas, mentales, emocionales y sociales de la salud; y otras áreas curriculares, que promueven un comportamiento saludable y una conciencia de los problemas de salud como parte de su instrucción básica.

Los servicios 

Que incluyen servicios de salud (relación unidades de salud con educativas coberturas, eficiencia y efectividad) que dependen de las necesidades y preferencias de la comunidad y servicios para estudiantes con discapacidades y necesidades especiales de atención médica; servicios de asesoramiento, psicológicos y sociales, que promueven el éxito académico y abordan las necesidades de salud emocional y mental de los estudiantes; y nutrición y servicios de alimentación, que brindan comidas nutritivas, educación nutricional y un ambiente escolar que promueve la nutrición.

Un modelo tradicional tiene esos tres componentes, pero uno completo, suma promoción de la salud para el personal escolar, servicios de asesoramiento y psicológicos, un ambiente escolar saludable y participación de los padres y la comunidad.

Lo triste en nuestra realidad es que no ha existido evaluación seria alguna nacional o internacional, ni de la organización y funcionamiento del programa escolar, ni de la razón y uso de sus asignaciones y sus impactos que permita calificar su calidad y resultados. No se puede planificar de esa manera un futuro exitoso del programa. 

Alfonso Mata
Médico y cirujano, con estudios de maestría en salud publica en Harvard University y de Nutrición y metabolismo en Instituto Nacional de la Nutrición “Salvador Zubirán” México. Docente en universidad: Mesoamericana, Rafael Landívar y profesor invitado en México y Costa Rica. Asesoría en Salud y Nutrición en: Guatemala, México, El Salvador, Nicaragua, Honduras, Costa Rica. Investigador asociado en INCAP, Instituto Nacional de la Nutrición Salvador Zubiran y CONRED. Autor de varios artículos y publicaciones relacionadas con el tema de salud y nutrición.
Artículo anteriorCompetencias versus capacidades escolares: Parte 2
Artículo siguienteEl Estado de Derecho