La Paz
DPA
El presidente de Bolivia, Evo Morales, emitió ayer un mensaje de solidaridad a favor de su colega brasileña, Dilma Rousseff, que enfrenta una crisis política, y de los exmandatarios de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, y Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, acusados de corrupción.
«Deseo expresar toda mi solidaridad con las compañeras Cristina y Dilma, que defienden la democracia, las transformaciones pacíficas de los países vecinos», afirmó el jefe de Estado boliviano en un acto público efectuado en Tarija (sur), cerca de la frontera con Argentina.
El gobernante se declaró sorprendido por las noticias que dan cuenta de la imputación en contra de Fernández de Kirchner por un caso de lavado de dinero. Morales afirmó que «se puso de moda montar juicios para acabar con líderes de izquierda».
En tanto, Lula y Rousseff enfrentan acusaciones de corrupción que podrían afectar la continuidad del gobierno brasileño porque el Congreso de ese país dispone de la posibilidad legal de inhabilitarlo.
Morales consideró que la estrategia de los partidos de oposición en Brasil es «inhabilitar a Lula» para las próximas elecciones de Brasil, previstas para 2018.
«Está revolución democrática con presidentes o gobiernos progresistas ya es imparable en Sudamérica. Y ¿qué es lo que hacen para debilitarlos? Hacen golpes de Estado desde el imperio norteamericano», añadió, aunque consideró que «las Fuerzas Armadas no lo permitirán».