El Juzgado Quinto Penal libró de cargos a los estudiantes de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac), Sergio Yoel Morataya y Heizel Morales, tras determinar que no hay elementos en su contra que amerite enviarlos a juicio por la supuesta ocupación del Paraninfo Universitario durante las protestas que se realizaron en contra de la designación de Walter Mazariegos como rector de esa casa de estudios en 2023.
Según determinó la jueza Judith Secaida, aunque el Ministerio Público (MP) ratificó su acusación en contra de los estudiantes, la misma contiene una serie de inconsistencia que hacen dudar de la presunta participación ilícita que el ente reclama en contra de Morataya y Morales.
POSIBLE DETENCIÓN ILEGAL
Durante el análisis, la juzgadora señaló una serie de situaciones que hacen ver que el MP pudo haber violado de forma flagrante los derechos de los dos detenidos.
Según se indica en la acusación, Morataya y Morales fueron detenidos en flagrancia el 15 de diciembre de 2023 a las 15 horas aproximadamente, cuando estos ocupaban el Paraninfo Universitario. «Pero si vamos al allanamiento, ingresaron (el MP) a las instalaciones del Paraninfo en cualquier de esas direcciones que ahora resultan que son cuatro, a las 6 horas con 20 minutos», resaltó Secaida.
La jueza señaló que si los fiscales ingresaron a las 6 de la mañana, por lógica, si los estudiantes cometían un delito en flagrancia, estos tuvieron que haber sido detenidos desde esa hora y puestos a disposición de juez competente en un plazo de 6 horas como lo establece la Constitución Política de la República de Guatemala, situación que no se dio, pues también el acta de los agentes captores, relatan que estos fueron detenidos formalmente hasta las 3 de la tarde.
«¿A qué hora podemos tomar la flagrancia?», reclamó la jueza, «Si, finalmente, fueron puestos a disposición de juez hasta las 20 horas con 12 minutos», recalcó.
Ante estos hechos, Secaida señaló que existe la posibilidad de que se haya cometido una «detención ilegal», en contra de los estudiantes, por no haberlas puesto a disposición de la justicia en el tiempo establecido en la ley.
SIN PERTENENCIAS
Durante el allanamiento, el MP aseguró que encontró machetes, bombas molotov, megáfonos y otros elementos que, según aseguraron, eran parte de las pruebas en contra de los estudiantes.
Sin embargo, en el análisis, Secaida señaló que hay varios objetos que fueron encontrados, pero la investigación no determina «que objeto le encontraron a cada uno». Ante esta situación, la juzgadora se preguntó: «¿Si estaban con el megáfono, si estaban con los machetes?, no se indica, por eso la relación debe ser clara, precisa y circunstanciada»
Así también, la fiscalía los acusaba de usurpación agravada, por la supuesta permanencia de varios días en el centro universitario, pero Secaida indicó que la acusación «no indica cuantos días estuvieron dentro del Paraninfo».
USAC ES DEL PUEBLO
Por último, la jueza señaló que si bien es cierto, se señala de una ocupación ilegal supuestamente cometida por parte de los estudiantes en instalaciones de la Usac, es de recordar que dicha casa de estudios tiene una autonomía y no es un ente privado.
«Es la única institución que no pertenece a una sola persona o entidad privada, sino que es una entidad autónoma regida por sus propias autoridades, aunque forma parte del Estado de Guatemala, goza de autonomía», señaló.
Secaida aseguró a demás que «la Usac pertenece al pueblo de Guatemala y es administrativa de manera al pueblo pro su comunidad universitaria dentro del estado legal guatemalteco».
BATALLA INTERNACIONAL
Tras conocer la decisión de la jueza, los estudiantes y sus defensas aseguraron que se preparan ante una posible apelación que se pueda presentar en contra de la decisión de Secaida.
«Si la apelación llega a la Sala Tercera (Penal) ya sabemos que van a resolver», señaló el defensor, Juan Castro.
Así mismo, señalaron que ya iniciaron gestiones para presentar una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) tras las violaciones a sus derechos por parte del Consejo Superior Universitario de la Usac, comandado por Mazariegos, al tomar la decisión de expulsarlos sin agotar el debido proceso y vedarles el derecho a la educación superior.







