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(Los alcaldes que recorren el camino)

En la tradición navideña, la carroza o el trineo de Santa Claus es el vehículo que transporta los regalos desde el taller hasta cada hogar. Sin ella, ni los duendes ni los renos tendrían cómo entregar la magia. En nuestra metáfora guatemalteca, la carroza representa a los alcaldes: autoridades locales que llevan sobre sus hombros la responsabilidad inmediata de conectar las decisiones nacionales con las necesidades concretas de la gente.

Los alcaldes son la parte más visible del sistema político en las comunidades. Son quienes recorren las calles, quienes dan la cara en los mercados y quienes reciben las demandas más urgentes de los ciudadanos. Sin embargo, en muchos casos, esta carroza, que debería estar bien construida y resistente, aparece desvencijada, con ruedas flojas y adornos superficiales. No siempre cumple con la misión de trasladar esperanza, sino que a menudo se convierte en un vehículo pesado, cargado de corrupción, promesas incumplidas y clientelismo.

El trineo navideño, en su esencia, está diseñado para avanzar ligero, volar si es necesario y llegar a todos los rincones, sin importar lo lejano del destino. Los alcaldes, en cambio, muchas veces convierten su carroza en un símbolo de poder personal, adornándola con lujos, propaganda y favores políticos. De este modo, lo que debería ser un medio para servir a la población, se transforma en un carruaje privado que lleva a cuestas intereses particulares, olvidando a los niños que esperan regalos en las aldeas más apartadas.

No obstante, la metáfora también nos permite soñar con otra posibilidad. Imaginemos una carroza sólida, transparente y ligera, capaz de recorrer los caminos rurales y urbanos sin romperse, impulsada por la energía de los ciudadanos que confían en sus líderes locales. Cuando un alcalde entiende que su misión es servir y no servirse, la carroza se convierte en vehículo de desarrollo: pavimenta calles, ilumina plazas, construye escuelas, impulsa mercados y, sobre todo, fortalece la confianza de la gente.

En Guatemala, el reto es claro: necesitamos alcaldes que conviertan sus carrozas en herramientas de transformación social, que recorran cada rincón con humildad y visión, y que comprendan que la política local no es un desfile de vanidad, sino la ruta diaria de servicio y dignidad. Solo así, la carroza de Santa Claus podrá cumplir su destino: ser el vehículo que acerca la esperanza a cada hogar.

Dr. Rafael Mejicano Díaz

Dr. Rafael Mejicano Díaz, Especialista en Prótesis Oral, MSc, Ph.Hc. y Ph.O.C., referente de la odontología guatemalteca. Con amplia trayectoria docente, gremial y clínica, ha impulsado innovación, ética y servicio social. Su legado integra ciencia, liderazgo institucional, pensamiento crítico y compromiso humanista.

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