Washington,
Agencia dpa
El 35 por ciento de los estadounidenses considera que los republicanos realizarían un mejor trabajo en materia de migratoria, frente al 27 por ciento que cree que los demócratas lo harían mejor.
Esto supone un fuerte cambio con respecto al mes de diciembre, cuando los estadounidenses pensaban que los demócratas (31 por ciento) harían un mejor trabajo en materia migratoria que los republicanos (26 por ciento).
Los encuestadores consideran que la crisis humanitaria provocada por la llegada de miles de niños indocumentados no acompañados a la frontera -la mayoría de ellos procedentes de Centroamérica- ha hecho cambiar las percepciones de la ciudadanía estadounidense sobre este asunto.
«Los niños centroamericanos han reabierto totalmente el debate sobre si nuestras fronteras están seguras», asegura Bill McInturff, uno de los responsables del sondeo.
Aunque el número de niños no acompañados detenidos en la frontera se ha reducido considerablemente en los meses de verano, ha calado en el público estadounidense el mensaje de los republicanos de que la frontera no está segura.
También parece haber tenido influencia, según los encuestadores, las denuncias de los republicanos que sostienen que las laxas políticas migratorias de la administración Obama han tenido un efecto de llamada, pues los «coyotes» han hecho creer a los padres centroamericanos que si sus hijos cruzan la frontera podrán quedarse a vivir en Estados Unidos.
McInturff considera que el debate sobre la reforma migratoria se ha visto reducido a una palabra: amnistía.
El apoyo de los estadounidenses a que una futura reforma migratoria ofrezca a los inmigrantes indocumentados una vía para obtener la ciudadanía estadounidense ha bajado con respecto al mes de abril.
En abril, el 64 por ciento se mostraba a favor de ofrecer a los indocumentados una vía para la ciudadanía, frente al 35 por ciento que se oponía. Este mes, el apoyo a esta medida es sólo del 53 por ciento, mientras que el 45 por ciento se opone, un alza de 20 puntos con respecto a abril.
En la encuesta de opinión, realizada entre el 3 y el 7 de septiembre, entrevistó a 1.000 votantes estadounidenses registrados en todo el país.
