Boston/Santa Clara
Agencia dpa
Durante la celebración del triunfo de los Denver Broncos en la final del Super Bowl, Peyton Manning se mostró más como hombre de familia que como jugador y, aunque rehusó hablar sobre su futuro, todo parece indicar que aprovechará la victoria para retirarse en lo más alto.
Después de coronarse como el quarterback de mayor edad en ganar un Super Bowl, la estrella de 39 años cedió el trofeo Vince Lombardi durante la celebración a sus compañeros y prefirió abrazar a sus hijos. Sobre los rumores de su retirada, Manning afirmó tener otras prioridades en este momento.
«Quiero besar a mi mujer e hijos y beber mucha cerveza. Eso lo prometo», afirmó durante la celebración de la victoria por 24-10 de los Broncos sobre los Carolina Panthers en la ciudad de Santa Clara.
«Voy a tomar un consejo que me dieron: voy a tomarme mi tiempo y evitar tomar decisiones emocionales. Ahora quiero disfrutar, luego voy a tomarme mi tiempo y reflexionar sobre mi futuro».
Desde la tribuna del estadio Levi’s, los demás miembros de su familia lo vitorearon. Tras su segunda y anhelada victoria en un Super Bowl, con la que, además, igualó a su hermano Eli Manning, Olivia y Archie, sus padres, no quieren volver a ver un partido de su hijo. «Quiero que Peyton se retire», afirmó la madre.
Hablar de Peyton Manning supone mencionar a una de las leyendas vivas de la NFL de los últimos casi 20 años. Activo desde 1998, el cinco veces mejor jugador de la temporada y ganador en 2007 del Super Bowl XLI (partido en el que también fue nombrado MVP), ostenta el récord de la NFL con 539 touchdowns y 71.940 yardas recorridas.
Tras lesiones, decepciones, sospechas por doping e incluso burlas por su menguante rendimiento, los expertos comenzaron a descartar a Manning durante esta temporada. Y, sin embargo, gracias a la férrea defensa de los Denver Broncos, el duelo generacional entre quarterbacks, uno de los principales alicientes del partido, se saldó con un triunfo para el veterano.
Cam Newton, 13 años más joven y rival directo, mostró su buen perder y elegancia al ser uno de los primeros en felicitarle sobre el terreno de juego y esforzarse por mostrar una sonrisa durante el abrazo bajo la lluvia de confeti.
Fue precisamente la defensa la que, durante el partido más importante de la temporada, sometió a Newton, de 26 años y elegido el día de antes MVP de la ronda anterior, a una enorme presión.
Que la línea defensiva de los Broncos fuera la principal protagonista y que el apoyador defensivo Von Miller fuera elegido MVP del partido fue significativo y demostró el incuestionable descenso en el rendimiento de Manning, de quien el equipo ya no puede depender.
En medio del ambiente festivo, la única respuesta que quedó en el aire fue la del futuro del «Sheriff» Manning. Durante la previa del encuentro se especulaba con que, en caso de éxito, el veterano quarterback anunciaría su retiro en lo más alto. «Los días de Peyton están contados», afirmó Archie, el padre del jugador.
En cuatro de las últimas diez victorias en un Super Bowl, uno de los dos hermanos Manning estuvo presente. Todo parece indicar que, a partir de ahora, aumentar el registro familiar dependerá solo de Eli Manning.
