Madrid
Agencia dpa

Entre los muchos logros del técnico argentino Diego Simeone, hay uno que le diferencia profundamente del Barcelona y Real Madrid: el espectáculo está en el marcador.

El Atlético de Madrid llegó a la mitad de la Liga española de futbol como líder con dos puntos sobre el Barcelona, aunque éste con un partido menos, y cuatro sobre el Real Madrid. Y sus números globales lo dicen todo: 27 goles a favor y sólo ocho en contra para facturar un total de 44 puntos.

Por poner un ejemplo, el equipo de Simeone marcó los mismos tantos que el Athletic de Bilbao, que es octavo clasificado.

La última vez que el Atlético de Madrid terminó la primera vuelta como líder del torneo fue en 1996, en la temporada del famoso «doblete» con Liga y Copa del Rey. Ahora, 20 años después, está en idéntica situación. Compró billete para revivir un sueño.

«Unas veces jugamos mejor, otras peor, pero somos un equipo», fue el perfecto resumen de Simeone tras resolver el domingo su visita al Celta de Vigo con un claro triunfo 2-0.

Desde que está en el Atlético de Madrid, Simeone sublimó el arte del concepto «equipo», algo que se ve no sólo en el campo, sino también fuera de él. Quien se quiera salir del camino, no tiene sitio en el plantel. Y si hay alguna estrella, ésa es el entrenador.

Cada partido es una fiesta para los seguidores rojiblancos, que sólo atienden al marcador. Y si encima hay buen juego -como en Vigo-, la celebración es doble. Pero lo que importa es el resultado, algo que no ocurre en el Real Madrid y el Barcelona, donde se valora tanto el qué como el cómo.

El conjunto rojiblanco se reforzó esta temporada con jugadores como Ángel Correa, Yannick Carrasco, Luciano Vietto o Jackson Martínez, futbolistas con buen pie, pero el equipo no cambió mucho respecto al de temporadas anteriores. Simeone quiere un bloque y todo empieza por el sacrificio defensivo, que incluye a los delanteros.

El Atlético encadenó tres triunfos consecutivos en la Liga española con un balance de cinco goles a favor y ninguno en contra. Más aun, sólo recibió tres tantos como visitante en todo el torneo, una cifra asombrosa.

De esta forma, ya nadie discute que está en disposición de pelear el título de la Liga española, y más si Barcelona y Real Madrid siguen dejándose puntos por el camino.

«Nosotros sabemos que tenemos equipo para pelear por la Liga. Vamos a ver cómo se da la segunda vuelta. Por el momento, todo está siendo genial», aseguró Carrasco, uno de los goleadores ante el Celta.

Ahora tiene un calendario que pondrá a prueba toda su fortaleza, pues después de recibir a Las Palmas visitará consecutivamente a Sevilla y Barcelona.

Pero Simeone cuenta con la tranquilidad de quien sabe que sus ideas son dogmas de fe en el Atlético. Nadie, ni club ni aficionados, le va a pedir otra cosa que competir. Y si compite bien, tendrá importantes posibilidades de ganar. Justo como lleva haciendo desde que comenzó la temporada.

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