Tengo vivencias, soy testigo y seguidor de la vida real de Guatemala, conozco el ocote, fuego, brasas, cenizas, chiriviscos, gas, candelas, quinqué, candiles, caminos de herradura, lodazales, veredas, aperos de labranza, mochila al hombro, sleeping bag, libros, navaja suiza, brújula, libreta de apuntes, pañuelos grandes multipropósitos, botas de hule, frijoles, caldo de hierba mora, tortillas, pishtones, atol de súchile, sé ordeñar por la mañana, amarrar chivos, puedo hacer nudo vaquero y muchos más, monto caballo a pelo en silla y aparejo,  puedo comer en plato de peltre como con las mejores vajillas de porcelana fina, he dado infinidad de cursos facilitando el proceso enseñanza aprendizaje con temas diversos; así también del sentir el trabajo de oficina en experiencias diversas con personal multidisciplinario y variedad de experticias, además  el buen amor y cultivo de las letras para intentar cambiar los destinos de la vida, vida que tiene un futuro con el pasado lleno de entresijos y muchas barreras por superar. He sentido y convivido con todos los estratos sociales, sé de sus formas de pensar, también he disfrutado de los mejores manjares, viandas y comidas silvestres inimaginables, total somos todo terreno, nos adaptamos a todo, esto lo único que da es conciencia social. 

Con todas estas cosas nos ha tocado bregar por las diferentes etapas de la vida haciendo y participando en reclamos para forzar los diálogos que permitan establecer consensos y acuerdos que mejoren la existencia de muchos que no tienen los medios necesarios para ser escuchados, sabiendo que nuestra participación pueda contribuir en hacer visible lo invisible para muchos porque esas tinieblas de la impunidad, nepotismo, prepotencia y corrupción no permiten ver la discrepancia entre la justicia y el derecho para seguir defendiendo la justicia sobre todas las cosas. 

Mis experiencias en casas de láminas, palma, pajón, de bajareque, casas de campaña, dormir a la intemperie con sueros antiofidios, dormir en tabla, comer sencillo y tantas cosas más nos ha hecho ser testigos de muchas injusticias, conocer, sentir y acompañar a mucha gente en situación de pobreza extrema en condiciones infrahumanas, siendo también conocedor de la inconsciencia de muchos que teniéndolo todo no hacen nada por cambiar la situación de esas grandes mayorías que viven en uno de los países donde hay pocos con mucho, hay gente que gana demasiado y no hace nada productivo que genere un buen costo beneficio por lo recibido y lo peor es que ni siquiera sabe porque están donde lo han puesto; esto es terrible e inaudito. 

Seguiremos en esa lucha por ver un día cambios significativos para que lo injusto sea justo y ver tanta desnutrición, pobreza extrema que son causados principalmente por la impunidad y exagerada corrupción. 

Atrevámonos a conocer esa Guatemala injusta y no vivamos en una cúpula de cristal que lo único que causa es egoísmo, envidia, individualismo, arrogancia, etc.; seamos empáticos con el dolor ajeno y finalmente seamos felices al ver bendición y sonrisas en caras ajenas; siendo sinceros y sobre todo honestos consigo mismos.

Rodulfo Santizo

minchitoss1@yahoo.com

Guatemalteco, migrante, facilitador de procesos para fortalecer el tejido social, visor y monitor del bienestar social, multifacético, persistente, soñador por una Guatemala diferente, gestor en desarrollo.

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