Los guatemaltecos en Estados Unidos (EE. UU.) se enfrentarán desde este 20 de enero a una de la etapas de mayor zozobra en ese país, cuando Donald Trump asuma la Presidencia por segunda vez.
Ahora, a diferencia de su primer mandato, tiene mayor legitimidad, al haber ganado la elección con mayor holgura. Incluso, ganó el voto popular.
Decir que la zozobra o el miedo afectará solo a los migrantes que no han podido regularizar su estatus migratorio, no es del todo cierto. Miles de los que han podido hacerlo, cuentan con familiares que no han completado el proceso.
En muchos casos, parejas de esposos tienen hijos estadounidenses porque nacieron allá y temen la separación familiar. Funcionarios nombrados por Trump para importantes puestos en el Ejecutivo parece que están dispuestos a cumplir al pie de la letra la principal oferta electoral del gobernante electo: llevar a cabo la mayor campaña de deportaciones en la historia del país.
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¿Qué planificar y cómo debe reaccionar un migrante si se enfrenta a una posible deportación?
Tom Homan, nombrado por Trump «zar» anti migración, dijo que EE. UU. está listo para deportar a familias enteras, incluidos a menores de edad que hayan nacido en ese país, hijos de migrantes no regularizados.
“Sabías que estabas en el país ilegalmente y elegiste tener un hijo. Así que pusiste a tu familia en esa posición”, dijo Homan en una entrevista con The Washington Post, en referencia a las familias que tuvieron hijos en EE. UU. y que por ley son ciudadanos estadounidenses.
CONTAR CON UN PLAN (ANTES)
¿Pero qué puede hacer un migrante con estatus migratorio irregular para minimizar los impactos de una eventual deportación o incluso evitarla?
El abogado experto en Inmigración, Luis A. Guerra, del bufete Guerra-Sáenz, con sede en Florida, EE. UU., expuso que es vital que un inmigrante sepa «en donde está parado», es decir, conocer cuál es su situación migratoria real y actual y a qué figuras o beneficios migratorios podría acogerse.
En todo caso, dice, debe buscar asesoría con un abogado honesto, profesional y que tenga experiencia en casos de inmigración, no aquellos que recién empiezan a ejercer, expresó.
El migrante ya debe «saber sus estrategias legales para ver si puede salir —libre— en fianza o si puede pelear el caso de deportación. La asesoría de calidad es importantísima», detalló.
En sintonía con Guerra, el analista migratorio guatemalteco, Fernando Castro, precisó que es necesario elaborar un «plan de emergencia familiar» que incluye memorizar los números telefónicos de familiares y de un abogado de confianza. También es importante contar con los documentos de identificación vigentes y siempre portarlos, aunque se tenga ya un estatus migratorio regular.
Si el inmigrante posee cuentas bancarias, añade, debe pensar en una segunda persona que tenga autorización para retirar dinero.
Algo que muchos consultan es qué hacer si el migrante tiene hijos que nacieron en EE. UU. Ante una eventual deportación, hay algunas personas que consiguen un poder legal para que un tercero se haga cargo de sus hijos, si su deseo es que permanezcan en la Unión Americana.
«Dejar a los hijos a cargo de otro inmigrante en situación irregular, es una situación en donde corren serio peligro», subrayó el analista.
Por su lado, el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex), en sus redes sociales, promociona varias recomendaciones, entre estas:
- No manejar vehículo si se consume alcohol.
- No viajar en un automóvil si el conductor no porta identificación o se encuentra en estado de ebriedad.
- Asegurarse de que todas las luces del vehículo funcionen. Esto para evitar que cualquier autoridad le haga el alto y, posiblemente, pueda pedirle cuentas de su estatus migratorio.
- Verificar que el automóvil esté registrado en el estado donde se utilizará y que cuente con seguro ya que es obligatorio, y que este cubra los costos en caso de accidente o lesión.
- Utilizar siempre el cinturón de seguridad y respetar todas las señales de tránsito.
- Evitar portar documentos falsos ya que es un delito grave.
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QUÉ HACER SI ES DETENIDO (DURANTE)
Especialistas recomiendan mantener la calma si se da el caso de que agentes de Inmigración llegan a casa de un migrante en situación irregular.
Guerra recomienda «no abrir la puerta a menos que —los oficiales— tengan una orden de cateo verdadera, no una que se inventa ICE —Servicio de Inmigración y control de Aduanas, en inglés—, o que dice tener».
«Si ingresa a la casa no debe hablar nada con ellos. Siempre se hacen pasar como amigos del inmigrante pero no lo son», advierte.
Castro añade que los agentes de ICE deben mostrar una orden firmada y sellada por un juez, y que para constatar la veracidad se debe pedir que la pasen debajo de la puerta o a través de la ventana.
El Minex, por su lado, recomienda que si una autoridad detiene a un migrante, este debe estacionar el carro, apagar el motor y esperar a que el agente se acerque. «Si todo está en orden no habrá ningún problema», remarca.
Si se llega a dar una detención fuera de la vivienda, los expertos recomiendan mantener la calma, no hacer movimientos bruscos ni discutir, y menos resistirse a la detención. Lo más aconsejable es mantener las manos visibles y libres de objetos, dice Castro.
Agrega que el inmigrante tiene derecho de quedarse callado, incluso si es cuestionado sobre su estatus migratorio o el de las personas que lo acompañan.
QUÉ HACER DESPUÉS DE UNA DETENCIÓN
Si la detención llegara a producirse, lo más importante a tener en cuenta es que no se debe firmar ningún documento sin la asesoría profesional de un abogado, comenta Castro.
Recuerda que un inmigrante detenido tiene el derecho de comunicarse con su consulado o bien pedir que un oficial haga la notificación de su detención.
También puede pedir un abogado, aunque lo ideal es que ya se cuente con un plan que incluya a uno para llamarlo en caso de emergencia, puesto que hacer al menos una llamada, también es un derecho.
Si se carece de dinero para costear una defensa, organizaciones de apoyo en EE. UU. pueden ayudar a través de abogados pro-bono. Es necesario averiguar cuáles son las más cercanas y tener el contacto de ellas.
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Por último, Guerra recuerda que en ciertos casos se puede luchar por evitar la deportación puesto que hay muchos alivios en las cortes de Inmigración, por ejemplo, la orden de comparecencia, asilo defensivo, ajuste de estatus, cancelación o retención de la deportación, convención contra la tortura, entre otros.
En cualquier caso, remarca, lo más importante es tener definida una estrategia para actuar. «Las familias sin un plan de acción están más vulnerables a una deportación», afirma el abogado.
DEPORTACIONES
Según estimaciones del Minex, la comunidad de guatemaltecos en EE. UU. supera ya los 3 millones 256 mil, la mayoría vive en situación migratoria irregular.
El año pasado, fueron deportados 61 mil 680 connacionales desde aquel país, la mayor cifra en la historia. En total arribaron 508 vuelos, un promedio de 121 cada uno. Aunque el promedio es más o menos de dos diarios, si se toman en cuenta solo días hábiles, hay semanas en las que vienen hasta cuatro o cinco vuelos.
Hasta ahora, EE. UU. solo envía vuelos por la mañana, pero si se produjera un aumento de las deportaciones, tendrían que arribar por la tarde o noche.
Recientemente, el Minex lanzó recientemente la campaña «Guatemala cerca de ti», a través de la cual, aparte de dar recomendaciones a los guatemaltecos en EE. UU. pretende crear dos nuevos consulados y fortalecer los ya existentes.
También implementar herramientas tecnológicas, que permitan facilitar la generación de documentos esenciales como el pasaporte, la tarjeta de identificación consular o el Documento Personal de Identificación (DPI).
No obstante, Castro cree que la campaña se lanza tardíamente y carece de planes de inserción de la población que sea deportada.