Sobre las calles de aldea Las Pozas, en Asunción Mita, Jutiapa, el olor a pólvora se mezcló con la brisa calurosa de oriente, luego de una fuerte explosión, en la que varios niños salieron corriendo, en medio de Gaspar Telles, de 35 años, aún con bolsa de costal en mano y una mochila sobre su hombro, luego de viajar desde la Ciudad de Guatemala para acompañar a sus padres para las fiestas de año nuevo.
Aunque los 130 kilómetros hacia Las Pozas inició durante la tarde de este miércoles, su viaje tuvo una parada en su trabajo. Se levantó como todos los días, pero antes empacó para su odisea, un par de cajas de galletas, dulces, y fruta comprada un día previo, junto con su ropa.
El reloj caminaba lento durante la mañana, hasta las 5:30 de la tarde, tomó su chumpa, mientras pensaba “en Jutiapa ya ni la voy a necesitar”, sacó sus maletas y salió disparado hacia la Terminal, en la zona 4.
“¡Vaya! Monjas, Monjas”, “¡Vaya! Jutiapa, Jutiapa”, escuchó gritar a los ayudantes, en medio de las ventas, las personas apresuradas, y algunas personas que hacían sus compras de última hora.
Al fondo, resonó “Frontera, Frontera”, su bus, estaba esperándolo, corrió mientras los ayudantes del autobús le apresuraban intentando tomar sus pertenencias para guardarlas en los maleteros, y le explicaban el tramo carretero, que ya conocía.
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NAVIDAD EN FAMILIA
Gaspar se aventuró en el viaje hacia Jutiapa, recordando su promesa de regresar para año nuevo, para pasar el 31 de diciembre con la familia de su novia, una joven pequeña de 23 años, que recuerda en su mente que el único problema que tiene con ella es que también viven alejados, por lo que los viajes largos son una normalidad.
“Mi ‘mama’ me espera en casa, ya empezó a hacer los tamales, ya le toca solo a ella hacerlos, porque mi abuela no puede, pero ya le enseñó cómo hacerlos. Yo tengo que llegar rápido para empezar a cortar la fruta, aquí la llevo. Ya ella después le da el toque al ponche, solo a ella le sale rico”, afirmó con una sonrisa de oreja a oreja.
Un par de minutos después de subir en el bus, el sol se acostó, mientras el chofer del bus encendió las luces neón y colocó la música navideña de una USB plateada. Apretado entre los sillones, con las personas platicando sobre su hogar, las pupilas de Gaspar empezaron a relajarse.
La cabeza de Gaspar de movía en cada curva, golpeaba el hombro de su acompañante, se inclinaba hacia el pasillo, casi a punto de caer, pero su capacidad de viajar todos los días desde las 6 de la mañana, lo hacía experto en dormir en buses.
Recordó la voces de los vendedores, escuchó a otros pasajeros bajar sus maletas y pedir “la parada”, pero sus sentidos se alarmaron cinco minutos antes de llegar a Las Pozas, seguro y tranquilo, se levantó vio sobre su hombro a los demás pasajeros y tomó sus maletas.
Tres escaleras, y tocó el suelo árido de Jutiapa, con el monte crecido, y los árboles de morro difuminados por la noche. Caminó varios minutos sobre la calle de cemento, aunque luego el caminó se volvió de tierra, escuchó una explosión de “cuetes” y a lo lejos vió su hogar.
OTROS VIAJEROS
Al igual que Gaspar, miles de guatemaltecos retornan a sus lugares de origen, como es el caso de Patricio Pérez, quien sentado sobre la acera, con una camisa azul, espera el bus hacia San Marcos.
“Vivo en la zona 6, pero soy originario de la ciudad de San Marcos, y ahorita regresamos a visitar a los familiares”, expresó, con una mirada fuerte sobre su rostro.
Patricio detalló que solamente viaja a Tacana, San Marcos, dos o tres días, y que “el sábado está de regreso”, mientras recuerda que viaja a ver a su padres cada vez que puede, incluyendo Semana Santa y fin de año, desde hace 26 años.
“Deseamos que todas las personas se la pasen bien, nosotros tratamos con nuestros familiares, con nuestros amigos nativos, los vecinos y deseando a todos una feliz navidad y un próspero 2025.
#LHVideo | Edna Orozco viajó desde tempranas horas desde San Pedro Sacatepéquez, San Marcos, a hacer “unos mandados” y para visitar a su hermano, junto con su familia, previo a las fiestas de fin de año.
📸: Fabricio Alonzo / LH pic.twitter.com/lLdHL83BUN— Diario La Hora (@lahoragt) December 24, 2024
También, Edna Orozco viajó desde temprano este lunes 23 de diciembre desde San Pedro Sacatepéquez, San Marcos, a hacer “unos mandados” y para visitar a su hermano, junto con su familia, a quienes logra “casi cada cuatro meses”.
“No hay muchas personas viajando porque, hoy no hubo casi tráfico para entrar a la rápida. Nos tardamos casi 4 horas, lo normal es 6 horas (…) no hay afluencia de carros, como otras veces”, agregó sobre su viaje.
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RECOMENDACIONES PARA VIAJEROS
Sobre esta misma línea, la jefa de la Dirección General de Transportes (DGT), Elizabeth Velasquez, recomendó a los usuarios del transporte extraurbano verificar que los buses viajan a su rutas correctas, así como que los pilotos no conduzcan bajo efectos de alcohol o sustancias y denunciar si viajan a exceso de velocidad.
“Ellos tienen la potestad de denunciar y siempre ponemos a sus órdenes el número de cuatro cifras 1532, para que puedan enviarlo por WhatsApp y que puedan enviar los datos de los buses que infrinjan estas normas, porque es la seguridad de ellos lo que nos interesa garantizar”, agregó.
#LHVideo | Durante este lunes 23 de diciembre, guatemaltecos esperan retornar a sus lugares de origen, como es el caso de Patricio Pérez, quien pasará las fiestas de fin de año junto con sus padres en San Marcos.
📸: Fabricio Alonzo / LH pic.twitter.com/xFmvc0OAwk— Diario La Hora (@lahoragt) December 24, 2024
A los transportistas, recomendó llevar documentos legibles, tarjeta de operaciones, póliza de seguro vigente, así como la licencia vigente del piloto.
“Con eso ellos pueden evitar multas, nuestro fin no es multarlos a ellos, sino garantizar la seguridad de las personas y que estén circulando buses legales y no buses piratas”, agregó.
A su vez, resaltó que realizan operativos junto con la Dirección General de Protección y Seguridad Vial (Provial), por lo que detalló que si un bus viaja a exceso de velocidad, los usuarios pueden bajar en un centro de operaciones y denunciar al piloto.
Destacó que trabajan junto con la Policía Nacional Civil (PNC), la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) y la Dirección de Atención y Asistencia al Consumidor (Diaco) para recibir denuncias en todos los puntos.
Además, mencionó que DGT revisa documentación, mientras que Provial revisa los neumáticos, el estado del motor y del vehículo, por lo que pueden ser sancionados si faltan a las normas.
Con información de Fabricio Alonzo.
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