Periodistas en cobertura. Foto La Hora / José Orozco

La Red Rompe el Miedo presentó, este martes 15 de octubre, el Informe “Situación del periodismo en Guatemala”, en el que asegura que los compromisos del presidente Bernardo Arévalo con la prensa han resultado difícil de cumplir, ya que la violencia contra los medios de comunicación continúan de manera “imparable” en Guatemala.

Según explicó la organización, 2023 fue un año “luctuoso” para el periodismo guatemalteco, ya que 20 comunicadores se sumaron al exilio, a la vez que organizaciones documentaron entre 171 a 2019 agresiones durante las elecciones y el Paro Nacional, por lo que se esperaba que luego de un año “convulso” políticamente, la administración Arévalo sería marcado por propuestas democráticas de acción y cambio.

De acuerdo a Red Rompe el Miedo, previo a que Arévalo tomara posesión, funcionarios anunciaron iniciativas para la libertad de expresión, incluyendo garantías para el retorno de periodistas en el exilio, así como el inicio de un programa de protección, reformas a la Ley de Emisión de Pensamiento y el aplicación de la Política Pública de Protección a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos.

“A estas alturas de 2024, queda claro que ha resultado muy difícil cumplir con estos compromisos y que la violencia contra la prensa sigue imparable en el país, sin que el Estado cumpla a cabalidad su obligación de proteger a las personas periodistas”, expresó.

Sin embargo, resaltó que se han dado “pasos”, incluyendo la creación de la Instancia de Análisis de Ataques contra Personas, Organizaciones, Comunidades y Autoridades de los Pueblos Originarios a Defender Derechos Humanos del Ministerio de Gobernación (Mingob) que ha instalado una mesa técnica para trabajar sobre las agresiones contra periodistas.

DIPUTADOS Y PNC

De acuerdo al informe de Red Rompe el Miedo, durante la primera mitad del 2024, se han observado agresiones contra prensa principalmente por agentes del estado, siendo diputados y agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) los principales ejecutores de la violencia contra medios de comunicación.

Por ello, resaltó que quienes deberían cumplir con una obligación internacional de proteger a la prensa y garantizar la libertad de expresión, son quienes vulneran el derecho humano al criminalizar e intimidar a la prensa.

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A su vez, resaltó el acuerdo de la Corte de Constitucionalidad (CC) con el que clasificó información reservada, lo cual bloquea el acceso a la información pública no solo a periodistas, sino a la sociedad en general, a la vez que agravan aún más el contexto en el que se desarrolla el ejercicio periodístico en Guatemala.

También, destacó que agentes no estatales, como integrantes de partidos políticos e integrantes del crimen organizado son quienes atacan a la prensa.

Entre las agresiones más reportadas, destaca la intimidación, amenazas, acoso judicial, bloqueos informativos, así como limitaciones a la cobertura lo que da cuenta de los intentos por criminalizar a la prensa, así como de obstaculizar el trabajo de los reporteros, vulnerando el acceso a la libertad de información, libertad, seguridad e integridad de periodistas guatemaltecos.

PERIODISTA NO PRESENTAN DENUNCIAS

De la misma forma, el escrito detalla que muchos periodistas no presentan denuncias por las agresiones por la falta de confianza en el sistema de justicia o porque el Ministerio Público (MP) no suele investigar estos actos, así como que los “agresores son las mismas autoridades que estarían a cargo de recibir la denuncia”.

“Esta situación confirma el llamado internacional a que Guatemala cuente con un sistema de justicia autónomo y libre de corrupción; si los casos de agresiones contra periodistas no son denunciados y por ende tampoco investigados se manda un mensaje de impunidad y permisividad que da paso a que estas se sigan cometiendo”, puntualizó.

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Según el documento, desde enero a julio se han reportado 34 agresiones contra periodistas, siendo el departamento de Guatemala en donde mayores casos se registran, mientras que en Petén, Quiché y Jutiapa los ataques son enfocados a reporteros comunitarios que cubren temas locales como naturaleza ambiental o conflicto de tierras.

Además, resaltó que la mayor parte de los ataques, el 45%, son en contra de medios digitales, seguido de las radios comunitarias con un 35% y medios impresos y televisiones con un 25% de las agresiones.

Engelberth Blanco
Creo en la democracia y apelo por una educación de calidad para todas las personas, el acceso al agua y la tierra.
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