CAOS «DE VERGÜENZA» en la final de la Copa América

Diego Estuardo Guzmán

Personas saltando las bardas, poco control en las entradas y denuncias de duplicidad de las entradas causaron un verdadero caos en la entrada del estadio Hard Rock, en Miami, en donde hubo algunos detenidos a causa del desorden, previo al arranque de la final de la Copa América.

En algunos lugares se veía a personas escalando las paredes, bardas y hasta techos para ingresar al estadio, por lo que el partido se retrasó poco más de una hora, siendo hasta las 19:15 horas que comenzó la entonación de himnos de cada selección.

Inicialmente, se dijo que el retraso sería de 30 minutos, comenzando el encuentro a las 18:30 horas, sin embargo, el acto protocolario arrancó 45 minutos después de la hora fijada luego de los disturbios.

Por los problemas en los accesos que se produjeron por la avalancha de aficionados sin boleto que entraron al estadio Hard Rock forzando una de las puertas y arrasando a miembros de la seguridad del estadio.

Ante el problema que se originó en los accesos, que estuvieron cerrados durante más de una hora, hasta que la seguridad del estadio se hizo con el control de la situación, la Conmebol decidió que la final se postergase media hora.

Por los problemas en los accesos por la avalancha de aficionados sin boleto que entraron al estadio Hard Rock forzaron una de las puertas, arrasando con miembros de la seguridad del estadio.

Ante el problema que se originó en los accesos, que estuvieron cerrados durante más de una hora, hasta que la seguridad del estadio se hizo con el control de la situación, la Conmebol decidió que la final se postergase media hora.

La CONMEBOL informó que «las personas que no cuentan con ‘tickets’ (entradas) no podrán ingresar al estadio. Solo aquellos que tengan tickets adquiridos podrán hacer el ingreso una vez que vuelvan a ser habilitados los accesos».

Los aficionados intentan entrar al estadio tras los retrasos en el partido final de la Copa América entre Argentina y Colombia, en Miami Gardens, Florida, el domingo 14 de julio de 2024. (Foto AP/Lynne Sladky)
Los aficionados intentan entrar al estadio tras los retrasos en el partido final de la Copa América entre Argentina y Colombia, en Miami Gardens, Florida, el domingo 14 de julio de 2024. (Foto AP/Lynne Sladky)

ANTICIPARON RIESGOS DE SEGURIDAD

El día anterior, el técnico argentino Lionel Scaloni y algunos jugadores de su selección y la de Colombia habían manifestado su temor y pedido más seguridad, tras un incidente de los jugadores uruguayos con aficionados de Colombia en la semifinal.

Se pudo ver a un puñado de gente que recibía atención médica y que pedía agua en el calor agobiante en el sur de Florida, que superó los 35 grados centígrados de sensación térmica (95 F).

La policía pareció abrir nuevamente algunas de las puertas brevemente para dejar que un puñado de personas ingresara, mientras la multitud enardecida empujaba los portones en un intento por derribarlos a la fuerza.

A las 8:10 pm (Hora del Este), los guardias de seguridad empezaron a dejar a entrar a más fanáticos, pero la conmoción no terminó. Los fanáticos siguieron empujando contra las puertas. Ingresaron y comenzaron a correr en diferentes direcciones. Al parecer no se revisaba si tenían entradas. Algunos fanáticos saltaban para ingresar al estadio.

Foto: Agencia AP
Foto: Agencia AP

El departamento de policía del condado de Miami-Dade emitió un comunicado en su cuenta de X diciendo que hubo “varios incidentes” antes de que las puertas del estadio se abrieran.

“Estos incidentes han sido el resultado del comportamiento revoltoso de los aficionados que intentaban acceder al estadio”, dijo el comunicado. “Pedimos a todos que sean pacientes y respeten las reglas establecidas por nuestros oficiales y el personal del Hard Rock Stadium. Estamos trabajando activamente con Hard Rock Stadium para garantizar un entorno seguro para todos los asistentes”, indicó tras advertir que el «comportamiento revoltoso hará que los ejecuten y/o arresten”.

Se esperaba una concurrencia de más de 65 mil aficionados.

Con información de AP