Está en marcha el proceso electoral que tendrá el coste de varios millones; todos los guatemaltecos debemos ser testigos y supervisar el evento en los 340 municipios que tiene la República, evitar el manoseo de votos usual en todos los eventos con descarados fraudes para favorecer a financistas y narcos, asaltar los cargos públicos por una supuesta elección popular, seguir robando y lo importante: por ninguna razón permitir la reelección de diputados y alcaldes que por años se han aferrado a los puestos para hacer negocios espurios, en perjuicio de connacionales que se mueren de hambre, que les obliga a emigrar para sostener a su familia.
Tener presente que el pueblo… nosotros somos soberanos y exigir que los que llegan al poder en los próximos años, tengan de obligación que Guatemala, merece lo mejor, crear fuentes de trabajo, mejorar la red hospitalaria y la desnutrición en el área rural; rescatar el desprestigio que tenemos a nivel internacional; terminar con la violencia, exigir que se cumpla con lo que dice la Constitución; que se mejore la red vial que en toda la República está en deterioro y en serio perjuicio para los guatemaltecos; que se mejore la educación, para que los profesionales del mañana, sean los futuros ciudadanos que deberán gobernar, que la juventud de ahora, tenga clara visión y las experiencias que nos han dejado los sucios politiqueros que se han aprovechado de la inocencia del ciudadano para explotarlo; que los organismos del Estado se ciñan claramente lo que dice la carta magna.
29 partidos políticos están autorizados para participar en las elecciones de junio; según la Ley Electoral y de Partidos Politicos comités cívicos pueden postular candidatos a las 340 corporaciones municipales. La desconfianza impera en la población y teme que el proceso electoral, resuelva en última instancia en las Cortes, varios de los aspirantes a la primera magistratura pueden ser tachados por su “pasado”, no representan garantía de credibilidad y la ambición de gobernar para seguir robando, las experiencias del pasado y sus ofertas no representan ningún beneficio para el país, pues el pueblo sigue muriéndose de hambre y sus ofrecimientos son engaños como ha sido en los últimos años.
Se conocen varios candidatos a la presidencia y su ambición de llegar a la presidencia, por 15 días permanecieron con champas improvisadas en las afueras del Registro Electoral, para aparecer en los primeros lugares de la boleta electoral. De los candidatos a la presidencia, algunos tienen experiencia en los cargos que han ocupado en la administración pública. Tienen ideas nuevas, pero el problema son los financistas, quienes son los que le hacen la “rosca” al nuevo presidente, que lo presionan para nombrar a los nuevos funcionarios y cumplir así con el pago de la factura como que ha sido costumbre desde hace años y no hay que dejar por un lado a los narcos que sobornan a las autoridades para poder operar con libertad y comerciar la droga con países vecinos.
Las nuevas autoridades que por ley deben tomar posesión el 14 de marzo a las 14 horas del año entrante, deben actuar con carácter y romper los lazos de los corruptos, porque este año es el año que el pueblo debe tener plena conciencia que es el soberano, el que pone… pero también quita y que todos los Organismos del estado sean independientes y no dictadores solapados como ha sido el actual gobierno que tiene el control de esas entidades, violando la Constitución y hacer el mayor esfuerzo de recuperar la confianza internacional.