DALLAS
AP
Una mujer cuya muerte en una cárcel de Texas ha generado sospechas sobre la conclusión oficial de que se ahorcó le dijo a uno de los guardias durante el proceso de registro que ya había intentado suicidarse antes, informó ayer la policía.
Glenn Smith, jefe de policía del condado Waller, dijo que dos celadores entrevistaron a Sandra Bland después de que fuera arrestada el 10 de julio. Indicó que la mujer de 28 años de Illinois le dijo al segundo entrevistador que no estaba deprimida, pero sí molesta por su arresto, que ocurrió tras una confrontación con un agente blanco que la detuvo por una violación menor a las reglas de tránsito.
Smith recalcó que los dos celadores que hablaron con Bland insistieron que parecía en buen estado de ánimo cuando fue fichada por el cargo de agredir a un servidor público.
El abogado que representa a la familia de Bland, Cannon Lambert, dijo que los parientes no tienen evidencia de que hubiera intentado suicidarse alguna vez ni de que hubiera recibido tratamiento por depresión.
Los documentos cubiertos en nombre de la mujer muestran que ya había intentado suicidarse tras perder un bebé. Pero los papeles de su registro en la cárcel dados a conocer el miércoles también indican que no tenía pensamientos suicidas en el momento de su arresto, y que ni el agente que la detuvo ni nadie más en la cárcel creían que corriese riesgo alguno.
Los documentos también contienen discrepancias.
Un cuestionario dice que Bland tomó píldoras en 2015 en un intento por suicidarse tras perder el bebé. Un documento aparte rellenado por otro empleado de la prisión indica que dicho suceso ocurrió en 2014. Un papel que la mujer tuvo pensamientos suicidas el año pasado, y otro dice que no fue así.
Bland fue arrestada el 10 de julio y se la encontró muerta en su celda tres días después. Un forense determinó que su fallecimiento se debió a suicidio por ahorcamiento, pero su familia y amigos no están de acuerdo. El organismo policial Texas Rangers y el FBI investigan lo ocurrido.
La autopsia realizada por el forense del condado Harris se ha completado y se entregó al condado Waller, donde las autoridades no han dicho cuándo se dará a conocer.
El cuestionario sobre el suicidio también destaca que Bland dijo a los celadores que padecía epilepsia y estaba tomando medicamentos para controlarla.