Buenos Aires
Agencia dpa
River Plate de Argentina derrotó hoy por 2-0 a Guaraní de Paraguay en el partido de ida de la semifinal de la Copa Libertadores en el estadio Monumental de Buenos Aires, un resultado que le permitirá ir más tranquilo a la revancha en una semana a Asunción para buscar su ansiado pase a la final.
Los «millonarios» se impusieron con goles de Gabriel Mercado, a los 60 minutos, y el uruguayo Rodrigo Mora, a los 73′, en el primer partido de semis del torneo continental que jugó River después de diez años.
River fue superior desde el inicio del partido aunque le faltó profundidad y un poco de suerte para abrir la cuenta en los primeros 45 minutos.
El conjunto dirigido por Marcelo Gallardo halló por el carril derecho el flanco débil de los paraguayos e insistió por allí con varias llegadas claras a la valla de Alfredo Aguilar. A los 10′ tuvo una gran oportunidad de abrir el marcador con dos cabezazos de Lucas Alario y Carlos Sánchez, pero primero el portero y luego el palo frustraron los intentos.
Guaraní se mostró prolijo y llegó a formar con una línea de cinco en el fondo para defender. Así consiguió luego neutralizar el ataque «millonario», pero la llegada del primer gol de River, cuando Mercado aprovechó el segundo pase en una jugada de pelota parada, desordenó al equipo dirigido por el español Fernando Jubero.
River comenzó a crecer y a los 73′ llegó el golazo de Mora, que tras recibir un certero pase de Alario picó el balón y superó a Aguilar que no llegó a reaccionar para saltar a taparlo.
El regreso «millonario» a las semifinales de la Libertadores resultó una fiesta para los hinchas que colmaron el estadio Monumental del barrio porteño de Núñez.
El triunfo resulta además una inyección de vitalidad para River, que comenzó el segundo semestre con altibajos, tras el alejamiento del delantero colombiano Teófilo Gutiérrez y con los regresos de Luis González y Javier Saviola.
«Lucho» González entró hoy como titular pero no resultó lo efectivo que se esperaba. Gallardo lo reemplazó luego por Gonzalo Martínez, quien revitalizó el mediocampo y le dio un juego más agresivo al plantel.
Gallardo celebró haber conseguido «una buena victoria». «No recibimos goles, hicimos dos goles, es un buen resultado para ir a jugar a allá», señaló el técnico, quien aseguró que fue «un partido muy duro, muy friccionado».
River se clasificó a la fase eliminatoria de la Libertadores casi por la puerta trasera, como el peor segundo, y tras dejar atrás en octavos al mejor de la fase de grupos, su histórico rival Boca Juniors, en un polémico choque suspendido porque hinchas «xeneizes» lanzaron gas pimienta a los jugadores «millonarios», venció en cuartos al Cruzeiro de Brasil.
Ahora va por un pase a la final con el objetivo de sumar su tercera Copa Libertadores a las ya conquistadas en 1986 y 1996.