El subsecretario de Estado antinarcóticos de Estados Unidos, Todd D. Robinson, viaja este miércoles a México para abordar con el gobierno mexicano cómo prevenir el tráfico de fentanilo y otras drogas, informó este martes el Departamento de Estado.
México es «la principal fuente» de tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos, advirtió en febrero la Comisión para Combatir el Tráfico de Opioides Sintéticos, que alertó de más de 100.000 muertos por sobredosis de drogas en territorio estadounidense en 12 meses.
El fentanilo, un opioide sintético similar a la morfina, es un fármaco recetado a pacientes con dolores intensos, pero también se consume de forma ilegal y mezclado con otras drogas. Robinson y la subsecretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Serena Hoy, examinarán el miércoles con funcionarios del gobierno mexicano «la necesidad urgente de acciones bilaterales para prevenir la producción y el tráfico de fentanilo» y otros narcóticos, señaló el Departamento de Estado en un comunicado.
Además, hablarán de «los avances logrados» en el bicentenario sobre Seguridad, Salud Pública y Comunidades Seguras entre Estados Unidos y México y analizarán cómo «mejorar la seguridad fronteriza», añadió la nota.
El jueves Robinson asistirá en Tijuana (norte mexicano) a un Foro de Infraestructura Fronteriza Estratégica para «discutir las prioridades y la modernización» en este ámbito.
La crisis migratoria es uno de los principales problemas tanto para Estados Unidos como para México.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos da cuenta de 221.303 detenciones de inmigrantes indocumentados en marzo a lo largo de la frontera con México.
Y este número podría aumentar a partir del 23 de mayo cuando se revoque una norma sanitaria («Título 42») aplicada durante la pandemia de covid-19 en virtud de la cual Estados Unidos expulsa a casi todos los migrantes indocumentados.