Fernando Mollinedo C.
Historiador y Columnista Diario La Hora

La actual Empresa Eléctrica de Guatemala, Sociedad Anónima (EEGSA) ha tenido en nuestro medio un largo proceso de formación hasta constituirse en lo que hasta hoy es.  Desde su régimen jurídico (Concesión) fue considerada como una figura de prestación de servicio público de energía eléctrica.

En el mes de abril de 1887, Julio Novella como presidente de la Compañía de Alumbrado Público Eléctrico llamada también “Compañía del Norte”, fue el primer concesionario (Recopilación de Leyes T. VI y VII, 1887, págs. 86 a 88). Posteriormente se hicieron concesiones a favor de la entidad “Letona Imboden Compañía Eléctrica de Guatemala” (RdeL. T. XII 1893-1894, págs. 276 y 277).

En 10 de octubre de 1894 por medio de Acuerdo Gubernativo se dio la concesión a Juan F. Ponciano, Juan Aparicio y Manuel S. Ayau (padre del fundador de la Universidad Francisco Marroquín) para explotar los ríos Michatoya y Samalá; y a Daniel Fuentes y Luis de Ojeda, para producir energía eléctrica en la Finca “El Salto” en Escuintla.

El 7 de diciembre de 1894 se constituyó la Sociedad Anónima de capital alemán, denominada “Compañía Alemana” que tuvo como nombre comercial “Empresa Eléctrica de Guatemala” o “Empresa Eléctrica del Sur” y se constituyó con los socios fundadores alemanes Enrique Neutze, Herman Hoepfner, Federico Gerlach y los guatemaltecos Víctor Matheu, Antonio de Aguirre y Juan Francisco Aguirre para lo cual se instalaron generadores para producir mil caballos de fuerza (HP), en la Hidroeléctrica de Palín.

En 1912 se celebró contrato entre la Municipalidad de Palín con la EEGSA para el suministro de alumbrado público y en 1916 en la Hidroeléctrica “El Modelo” y su distribución del fluido en la ciudad capital, Amatitlán y Palín.

Como consecuencia de la Primera Guerra Mundial y por tratarse de una sociedad con un capital predominantemente alemán, en abril de 1917, el presidente guatemalteco Manuel Estrada Cabrera también rompió relaciones diplomáticas con ese país y ofreció a Estados Unidos el uso de sus aguas territoriales, puertos y ferrocarriles para una “defensa común”.

A finales de ese mismo año el señor Joaquín Méndez fue enviado a Washington con la misión de persuadir al Consejo de Asuntos de Guerra ofreciendo la venta de café y azúcar a cambio de adquirir repuestos para la Empresa Eléctrica, la respuesta fue negativa hasta que Guatemala le declarara la guerra a Alemania y se nombrara como custodio de los bienes alemanes al estadounidense Edward W. Ames, por lo que se intervinieron las propiedades alemanas incluyendo plantaciones y fincas que pasaron a manos del gobierno.

A causa de los terremotos de 1917-1918 la casa ubicada en la esquina de la 8ª. Calle y 6ª. Avenida zona 1 sufrió severos daños por lo que fue demolida; en ese solar estuvo la casa de habitación de Justo Rufino Barrios; sitio donde fue construido el actual edificio de la Empresa Eléctrica, cuyo diseño fue realizado y  enviado de los Estados Unidos; la construcción estuvo dirigida por el Ingeniero Luis Schlessinger, fue el primer edificio construido a base de hierro remachado y fundido en concreto.

 

PRIMERA NACIONALIZACIÓN DE LA EEGSA.

La Asamblea Legislativa de Guatemala, por medio del Decreto número 976 de fecha 20 de abril de 1918 facultó al poder ejecutivo, como aliado de los “vencedores” para ocupar, intervenir, confiscar y nacionalizar los bienes e intereses de los alemanes en Guatemala, incluyendo los derechos y acciones de la compañía de electricidad alemana “Empresa Eléctrica del Sur” por actos que iban en contra de los intereses estadounidenses

Al ser el Estado de Guatemala el propietario de la compañía de Luz eléctrica de Guatemala, el presidente Manuel Estrada Cabrera nombró por Acuerdo Gubernativo de fecha 3 de julio de 1918 como Intendente General de la Empresa Eléctrica al ciudadano estadounidense Daniel B. Hodgson quien encontró serias dificultades para conseguir materiales y repuestos hechos en Estados Unidos pues no podía utilizarse para una compañía alemana.  En tal virtud, el Gobierno de Guatemala por medio del Decreto No. 742 de fecha 5 de octubre de 1918 autorizó al interventor Hodgson a confiscar, nacionalizar y vender acciones de la Empresa Eléctrica de Guatemala o Empresa Eléctrica del Sur de capital alemán.

El gobierno guatemalteco hizo reserva sobre algunas negociaciones, entre ellas: a) El Estado de Guatemala se reservó el derecho de dominio sobre la empresa y el servicio, b) prohibición expresa de vender tales derechos a personas individuales o jurídicas alemanas o a otros países aliados de Alemania.

Apareció en ese entonces la entidad denominada “Electric Bond And Share Company” (EBASCO) e inició las gestiones para el arrendamiento y posterior compra de la Empresa Eléctrica de Guatemala por medio de su apoderado Henry Whaland Catlin.  Para el efecto se emitió el Decreto Número 747 que permitió al Gobierno de Guatemala otorgar dicha empresa en arrendamiento.  Este último, obtuvo el arrendamiento el 29 de mayo de 1919, pero no a nombre de su poderdante la empresa “Electric Bond And Share Company” sino a nombre suyo por el término de 10 años.

Después el War Trade Board de Washington (Consejo de Asuntos de Guerra) concedió la licencia para que la Electric Bond and Share Company de Nueva York pudiera negociar la compra de la Empresa Eléctrica de Guatemala; meses después, el 20 de julio de 1920 el señor Alexander Clarke Clogher se presentó ante el gobierno guatemalteco como el apoderado del señor Catlin y en esa condición traspasó el arrendamiento a la Empresa estadounidense “American Foreign Power and Light Company”. Para ese momento ya no era el presidente Manuel Estrada Cabrera.

Surgió otro personaje llamado Albert Peden Ennis en representación de “American Foreign Power and Light Company” para obtener los derechos de arrendamiento de parte del señor Catlin, representado por Alexander Clark Clogher como apoderado directo del señor Catlin y vendió a la “Central American Power Co.” las acciones que Catlin había comprado al Gobierno de Guatemala.

El 4 de mayo de 1922 se legalizaron todos los pasos que hasta esa fecha se habían realizado a través de diferentes procedimientos y se suscribe el contrato por medio del cual el Gobierno de Guatemala otorgó a la “Central American Power Company” la concesión de servicio público de energía eléctrica autorizándola para operar y negociar en el país.

Se aprobó dicho contrato por medio del Decreto Legislativo No. 1192 de fecha 23 de mayo de 1922 por un plazo de 50 años.  En dicho contrato se estipuló que las tarifas a cobrar por la prestación del servicio de energía eléctrica serían revisadas de acuerdo con el Gobierno para hacer las modificaciones necesarias cada 5 años; pero por medio del Decreto Legislativo No. 1252 de fecha 9 de mayo de 1923 fue suprimida esa parte. La entidad concesionaria “Central American Power Company” cambió su razón social y se denominó “Empresa Guatemalteca de Electricidad, Inc.” cuyo cambio fue autorizado por Acuerdo Gubernativo de fecha 24 de mayo de 1924.

        El 5 de octubre de 1939 se constituyó la “Empresa Eléctrica de Guatemala, Sociedad anónima” por medio de la escritura pública autorizada por el Notario Alejandro Arenales Iriondo; su capital social estuvo integrado por las acciones que pertenecieron a la “Empresa Guatemalteca de Electricidad, Inc.” cuyo monto ascendía a tres millones doscientos cincuenta mil dólares ($3.250,000.00) que no correspondían a la realidad pues según lo estableció el Fiscal del Gobierno el monto real era de un millón de dólares, los cuales estaban suscritos por la “American Foreign Power”.

En 1940 el gobierno creó el Departamento de Electrificación, adscrito a la   Dirección General de Obras Públicas.

 

PLANTA TERMOELÉCTRICA LA LAGUNA.

La planta termoeléctrica de generación de energía eléctrica accionada con bunker denominada “La Laguna” fue construida en el kilómetro 37 de la carretera de circunvalación al Lago Amatitlán por la empresa multinacional estadounidense “Duke Energy” y fue inaugurada en el año 1946. Esta planta utilizó el agua del Lago como embalse mediante la colocación de compuertas, haciendo oscilar el nivel del agua de acuerdo con sus necesidades.

Allí trabajaron en turnos rotativos más de 170 técnicos en electricidad; por decisiones administrativas de la EEGSA se compraron dos plantas nuevas, de más potencia que fueron ubicadas en la costa sur; por lo que, la planta La Laguna dejó de funcionar en el año 2002 y muchas de sus estructuras fueron removidas para utilizarlas como chatarra.  Hace algunos años, la empresa ORAZUL adquirió los derechos de la termoeléctrica por lo que se supone que está en proceso de rehabilitación.

Las propiedades de la Empresa Eléctrica de Guatemala en el área de Palín y Escuintla, conocidas como el Sistema Hidroeléctrico del Río Michatoya, incluyendo las plantas de Palín, San Luis y El Salto en Escuintla, fueron vendidas en 1967 al Gobierno de Guatemala.  El Instituto Nacional de electrificación (INDE) puso en operación la hidroeléctrica Jurún Marinalá, cuyas turbinas son accionadas por el río Michatoya.

América & Foreign Power Company fue en 1968 la accionista mayoritaria de la EEGSA y se fusionó con Electric Bond And Share Company (EBASCO); ésta última cambió su nombre a Ebasco Industries Inc. y en 1969 se fusionó con la Boise Cascade Corporation.

Estando por vencerse el plazo de la concesión, el presidente de Guatemala en Consejo de Ministros, emitió el Acuerdo de fecha 23 de enero de 1971, en donde se dispuso no prorrogar el contrato celebrado con la “Central American Corporation” antecesora de la actual Empresa Eléctrica de Guatemala, S.A.

SEGUNDA NACIONALIZACIÓN DE LA EEGSA.    

El Estado de Guatemala participó en la gestión de la Empresa Eléctrica de Guatemala, Sociedad Anónima en su carácter de particular como cualquier persona común, pues COMPRÓ las acciones de dicha sociedad al precio que se cotizó en ese entonces en la “Bolsa de Valores”; por lo que pasó a formar parte de una sociedad anónima la cual se regula por los principios establecidos en el Código de Comercio.  No se sabe de qué país fue la “Bolsa de Valores” que tomaron como referencia para establecer el precio de compra.

El 9 de mayo de 1972 por medio del Decreto Legislativo No. 21-72 se autorizó al Organismo Ejecutivo la cantidad de dieciocho millones de dólares de los Estados Unidos de América para la adquisición de las acciones y proceder a su nacionalización.  Esta fue la segunda nacionalización del servicio de la generación y distribución de la energía eléctrica; no por utilidad pública ni función social de la empresa.

El presidente de la República emitió en Consejo de Ministros el Acuerdo Gubernativo de fecha 12 de mayo de 1972 para la compra del 91.73 % de las acciones de la Empresa Eléctrica y con esa misma fecha el Organismo Ejecutivo por medio del Ministerio de Comunicaciones y Obras Públicas acordó facultar al Procurador General de la Nación, para que ante los oficios del Escribano de Cámara y Gobierno otorgara la escritura pública que formalizara el contrato de compra-venta de las acciones de la Empresa Eléctrica de Guatemala, S.A a favor del Estado.

Amparado en el Decreto Legislativo No. 21-72 por solicitud del Ministerio de Finanzas al Banco de Guatemala en fecha 12 de mayo de 1972, con las visas de la Contraloría General de Cuentas para hacer el cargo de la cantidad descrita a la cuenta del Fondo Común del Gobierno de la República, se realizó el pago de los US$18,000.000.00 el 18 de mayo de 1972 por medio de un giro cablegráfico a favor de la propietaria de la EEGSA: BOISE CASCADE CORPORATION.

En el proceso de compraventa de la EEGSA participaron varios consorcios entre ellos: Enron Caribe IV Ltda. y Unión Fenosa Desarrollo y Acción Exterior; cuando parecía que la propuesta hecha por este consorcio “B” se adjudicaría la compra, con un monto de US$475 millones 470 mil, el altavoz anunció un monto superior ofrecido por el consorcio “A” estadounidense europeo integrado por T.P.S. de Ultramar, Ltda.; la española, Iberdrola Energía, S.A., y la compañía EDP (Electricidad de Portugal, S.A.).  Los más eufóricos el día de la adjudicación eran el ministro de Energía y Minas, Leonel López Estrada (nieto de Manuel Estrada Cabrera) el Gerente y el presidente del Consejo de Administración de la EEGSA Julio Campos.

Se puede considerar que el Estado de Guatemala al comprar las acciones de la “Empresa Eléctrica de Guatemala, S.A.” renunció a los procedimientos de derecho público que reconocía la legislación en ese entonces (1972) ya hubiera sido a través de la nacionalización, aplicando el principio de la reversión al vencimiento del plazo o bien declarando la caducidad, por el incumplimiento de la entidad concesionaria en el transcurso de los cincuenta años que duró la concesión, sin necesidad de haber pagado una suma tan elevada por la compra de las acciones.  El Ministerio de Economía por medio de Acuerdo Ministerial de fecha 20 de mayo de 1977 declaró a la EEGSA como Sociedad de Economía Mixta y sus acciones quedaron bajo la custodia de ese Ministerio.

A finales de 1980 principió a funcionar en los países latinoamericanos el modelo socioeconómico denominado Neoliberalismo con la finalidad de conseguir la estabilidad económica y la transparencia fiscal (ante la corrupción pública) para conseguir el “desarrollo” en los países empobrecidos.  Este modelo socioeconómico prácticamente obligó a los Estados “en vías de desarrollo” a abrir todas sus fronteras comerciales a los actores privados, transferir sus empresas públicas, bienes naturales y servicios básicos a las empresas privadas; en otras palabras, a reducir las entidades estatales, al grado de convertirlas en simples “gendarmes” de la “inversión” privada.

En este contexto ideológico se debe entender los “fundamentos teóricos” que esgrimió el gobierno para realizar la privatización de los servicios básicos como la energía eléctrica, salud, educación, transporte y comunicaciones entre otros. En 1995 el Congreso de la República aprobó el aumento de su capital financiero en acciones hasta la suma de 220 millones de quetzales.

En 1996 el Congreso de la República de Guatemala obediente a los dictámenes del programa de ajuste estructural impuesto por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial aprobó la LEY GENERAL DE ELECTRICIDAD Y SU REGLAMENTO con el propósito de desmonopolizar el sector eléctrico e impedir que una sola compañía se dedicara al mismo tiempo a la generación, transporte y comercialización de energía eléctrica.

LA VENTA DE LOS ACTIVOS DE LA EEGSA.

En agosto de 1997 los activos de GENERACIÓN de Empresa Eléctrica de Guatemala fueron vendidos a la firma “Guatemalan Generating Group” quedando EEGSA sólo con los activos para la distribución de energía eléctrica en la zona central del país.  El 31 de julio de 1998 el gobierno de Guatemala vendió el 80% de las acciones de la EEGSA en US$520 MILLONES CON VEINTICINCO CENTAVOS (Q.3,302 MILLONES) al consorcio haciéndose cargo de la administración de EEGSA; el 13 de abril de 1999 los nuevos accionistas aprobaron la fusión entre EEGSA y DECA (Distribución Eléctrica Centro Americana).

Ese mismo año (1998), el Estado de Guatemala vendió los activos de DISTRIBUCIÓN DE ENERGÍA del INDE a la corporación española Unión Fenosa (Deorsa-Deocsa) en US $101 MILLONES DE DÓLARES12 años después la firma española revendió dicho negocio por el monto de US $449 MILLONES DE DÓLARES a la empresa británica ACTIS (ENERGUATE)

EEGSA distribuía y comercializaba en ese entonces electricidad a 514 mil 171 usuarios en los departamentos de Guatemala, Escuintla y Sacatepéquez; contaba con 1,278 trabajadores en sus diferentes departamentos y su mayor demanda provenía del sector industrial (33%), siguiéndole el residencial (30%) y comercial con un 28%.

El 21 de octubre de 2010, como resultado de un proceso de negociación que se concretó en New York, Estados Unidos, “Empresas Públicas de Medellín” EPM -la mayor empresa de servicios públicos de Colombia– adquirió el 80% de las acciones de EEGSA por la cantidad de $605 MILLONES DE DÓLARES USA por lo que se convirtió en el nuevo socio mayoritario.

La operación incluyó también la compra de participaciones mayoritarias en Ideamsa, Comegsa, Trelec S.A., Amesa, Enérgica S.A. y Credieegsa; todas ellas propiedad del Consorcio y, al igual que EEGSA fueron administradas por la sociedad guatemalteca Distribución Eléctrica Centroamericana II, S.A. (DECA II)

        En el transcurso de los diez años siguientes realizó actividades empresariales   con nuevas plataformas de gestión: inversiones en la red de distribución para renovar la red eléctrica y distribución de baja tensión, alumbrado público y sistemas de soporte.

 

BIBLIOGRAFÍA: 

HISTORIA GENERAL DE GUATEMALA, Tomo V, Época Contemporánea 1898-1944. Asociación De Amigos del País. Fundación para la Cultura y el Desarrollo. Guatemala, 1996.

FONSECA RUIZ, OTONIEL. “Empresa Eléctrica de Guatemala, S.A.” Análisis Crítico. Revista de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de Guatemala.  Época X, Nos. 1 y 2.  enero a junio 1979. Guatemala.

MORALES URRUTIA, MATEO “LA DIVISIÓN POLÍTICA Y ADMINISTRATIVA DE LA REPÚBLICA DE GUATEMALA” Editorial Iberia-Gutenberg, Guatemala. 1961

E-GRAFÍA:

https://guatehistoria.com/ historia-de-amatitlan-y-su-feria/   Mollinedo Castillo, José Fernando. Consulta 19 de febrero de 2022.

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Fernando Mollinedo
Guatemalteco, Maestro de educación primaria, Profesor de segunda enseñanza, Periodista miembro de la Asociación de Periodistas de Guatemala, realizó estudios de leyes en la Universidad de San Carlos de Guatemala y de Historia en la Universidad Francisco Marroquín; columnista de Diario La Hora durante 26 años, aborda en sus temas aspectos históricos, educativos y de seguridad ciudadana. Su trabajo se distingue por manejar la palabra sencilla y coloquial, dando al lector la oportunidad de comprender de modo sencillo el universo que nos rodea. Analiza los difíciles problemas del país, con un criterio otorgado por su larga trayectoria.
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