La 26ª Conferencia de las Partes de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático 2021, se lleva a cabo en la Ciudad de Glasgow, Escocia desde el 31 de octubre pasado y culminará el próximo 12 de noviembre. El presidente de la COP26 Alok Sharma, en su discurso de apertura manifestó: “Durante casi dos años, la pandemia ha causado devastación y trastornos en vidas y medios de subsistencia en todo el mundo. Y sé que esto ha afectado especialmente a los países menos adelantados y a los pequeños Estados insulares en desarrollo. Y debido a la pandemia, como saben, pospusimos la COP26 por un año. Pero durante ese año, el cambio climático no se tomó un tiempo libre… En cada uno de nuestros países estamos viendo el impacto devastador de un clima cambiante. Inundaciones, ciclones, incendios forestales, temperaturas récord. Sabemos que nuestro planeta compartido está cambiando para peor. Y sólo podemos abordar eso juntos… Sabemos que esta COP26, es nuestra última mejor esperanza y sé que tenemos por delante un programa de negociaciones sin precedentes. Como presidente estoy comprometido a promover la transparencia y la inclusión, y dirigiré esta conferencia de conformidad con el proyecto de reglamento y con el máximo respeto por la naturaleza de nuestro proceso impulsada por las partes. Juntos, podemos aprovechar las enormes oportunidades para el crecimiento verde… Los astronautas hablan de la intensa emoción que sienten al mirar hacia la Tierra desde el espacio. Verla brillar a través de la oscuridad del cosmos. Increíble, improbable e infinitamente preciosa. Y si actuamos ahora, y actuamos juntos, podemos proteger nuestro precioso planeta.” Por su parte el Santo Padre Francisco en un mensaje de audio transmitido a través de la Radio BBC declaró: “El cambio climático y la pandemia de Covid-19 ponen al descubierto la vulnerabilidad radical de todos y todo y suscitan numerosas dudas y perplejidades sobre nuestros sistemas económicos y sobre las modalidades de organización de nuestras sociedades. Nuestras seguridades se han derrumbado, nuestro apetito de poder y nuestro afán de control se están desmoronando. Nos hemos descubierto débiles y llenos de miedos, sumergidos en una serie de crisis: sanitarias, ambientales, alimentarias, económicas, sociales, humanitarias, éticas. Crisis transversales, fuertemente interconectadas y presagio de una tormenta perfecta, capaz de romper los vínculos que unen nuestra sociedad dentro del precioso don de la Creación. Toda crisis requiere visión, capacidad de planificación y rapidez de ejecución, repensando el futuro de nuestra casa común y de nuestro proyecto común… Es fundamental el compromiso de cada uno hacia ese cambio de ruta tan urgente; compromiso que hay que alimentar también desde la propia fe y espiritualidad. En el llamamiento conjunto reclamamos la necesidad de actuar de manera responsable en favor de la ‘cultura del cuidado’ de nuestra casa común y también de nosotros mismos, tratando de erradicar las ‘semillas de los conflictos: avidez, indiferencia, ignorancia, miedo, injusticia, inseguridad y violencia.’ La humanidad nunca ha tenido tantos medios para alcanzar ese objetivo como los que tiene ahora. Los responsables políticos que participarán en la COP26 de Glasgow, están llamados con urgencia a ofrecer respuestas eficaces a la crisis ecológica en la que vivimos y, de este modo, esperanza concreta a las generaciones futuras. Pero todos nosotros, y está bien repetirlo, todos y dondequiera que nos hallemos, podemos tener un papel modificando nuestra respuesta colectiva a la amenaza sin precedentes del cambio climático, y de la degradación de nuestra casa común.” Todo sea por el bien de nuestro planeta Tierra.
Presidente - Oscar Clemente Marroquín
Director General - Pedro Pablo Marroquín P.
Jefe de Redacción - Grecia Ortiz
Editores - Raúl Barreno Castillo, David Sanchinelli