California es el primer estado en permitir que algunos hijos adultos añadan a sus padres como dependientes a sus seguros de gastos médicos, lo que —según los partidarios de la medida— ayudará a cubrir la pequeña porción de personas que viven ilegalmente en el país y no son elegibles para otros programas de asistencia.
La tendencia nacional ha sido permitir que los hijos queden amparados por los seguros médicos de sus padres. La ley de seguro de salud de Obama permite que los hijos se queden en los planes de sus padres hasta que cumplen 26 años. Algunos estados dejan que los hijos se queden en los planes de los padres hasta al menos los 30 años, incluyendo Florida, Illinois, Pensilvania y Nueva Jersey.
Pero ahora California se vuelve el primer estado en ir en la otra dirección, dejando que algunos adultos se integren a los seguros de gastos médicos de sus hijos. El gobernador Gavin Newsom firmó la ley esta semana, aunque no entrará en vigor sino hasta el 2023.
«La firma de la Ley de Cuidados Médicos de los Padres ayudará a más familias a cuidar de sus padres de la misma forma en que ellos cuidaron de nosotros», dijo el Comisionado de Seguros, Ricardo Lara.
Para ser elegibles, los adultos deben depender de sus hijos para al menos 50% de su subsistencia total. La ley es aplicable solamente para las personas que compraron sus seguros de gastos médicos en el mercado individual. Aquellos que lo tienen mediante sus trabajos, que incluye a la mayoría de las personas en el estado, no son elegibles.
Eso hace que la ley sea mucho más barata. Una versión previa, que habría sido aplicable a más personas, pudiera haber aumentado las primas de los empleadores entre 200 y 800 millones por año, dependiendo que cuántas personas se registraran. Eso hizo que grupos de negocios, incluyendo la Cámara de Comercio de California, se opusieran a la medida, y ganasen algunas concesiones.
La versión aprobada de la ley garantiza que muchas menos personas se pueden registrar. El Departamento de Seguros del estado estima que solamente unos 15.000 adultos usarán la ley, lo que resultaría en un aumento anual de entre 12 millones y 48 millones de dólares por primas individuales, de acuerdo con un análisis de la Comisión de Asignaciones del Senado. El cambio fue suficiente para que la Cámara de Comercio retirase su oposición.
El autor de la ley, el asambleísta demócrata Miguel Santiago, de Los Ángeles, dijo que la misma está dirigida a las personas que no pueden obtener seguros médicos subsidiados porque están viviendo ilegalmente en el país.
Covered California, el mercado de seguros médicos del estado, ofrece planes con descuento, pero solamente a ciudadanos estadounidenses. El programa Medicaid en California ofrece seguro financiado por el gobierno a las personas de 50 años y más, y 25 años o menos, sin importar su estatus de inmigración. Pero algunos adultos pudieran no ser elegibles porque ganan ligeramente más que el límite fijado.
El Labor Center de la Universidad de California, campus Berkeley, pronostica que más de 3 millones de personas no tendrán seguro médico en California el año próximo, 65% de las cuales serán personas que viven ilegalmente en el país.
La ley es «una forma de cerrar esa laguna», dijo Santiago, al tiempo que ayuda a otros adultos que no están cubiertos.
«Todos hablamos de aumentar el acceso a la atención médica y esta es una forma de hacerlo», dijo.