Pedro Pablo Marroquín Pérez
pmarroquin@lahora.com.gt
@ppmp82

La Fiscalía de Delitos Administrativos del Ministerio Público (MP) vuelve a la carga con una información que no le compete.

Quieren hablar con una persona que fungió como reportero de La Hora para preguntar “el motivo y el origen de la publicación de la nota FILTRACIÓN HACE FRACASAR OPERATIVOS DEL MP Y LA CICIG”.

Según el artículo 35 de la Constitución: “Es libre el acceso a las fuentes de información y ninguna autoridad podrá limitar ese derecho”, y en virtud de ello nosotros no tenemos por qué revelar las fuentes de información, pero en este caso el motivo y el origen está en hechos públicos.

Diversas fuentes han señalado al secretario del MP, Ángel Pineda, de ser la persona que se encargaba de filtrar la información necesaria para mantener informados a posibles sindicados y dentro de ese contexto, hay que entender cómo es que ciertos perfiles “falsos” propios de Netcenter tuvieron información del MP para alertar a personas sindicadas. Para dimensionar esto, hay que seguir lo que pasa en el caso del Instituto de la Víctima y lo que ahí se ha denunciado.

En todo caso, actualmente, crece el número de denunciantes que alzan la voz pero piden que para proteger su trabajo o hasta la vida misma, no pueden ser citados y los medios que somos serios, los que no andamos escudándonos en chismes, hacemos un trabajo integral para validar la información de las diversas fuentes de información.

Aunque en el caso de marras no es así, en el mundo, las filtraciones son la manera en la que muchas personas logran evidenciar el sistema sin “ponerse en tanto riesgo” y ahora resulta que el MP se encarga de buscar las fuentes de información de los medios y periodistas, pero no mueve un dedo para investigar las serias acusaciones que pesan sobre el mismísimo, comosiama, Secretario General de la Institución.

Ángel Pineda está igual o más protegido por Consuelo Porras que Alejandro Giammattei, pero la intención de la solicitud es mandar un mensaje claro de que el MP no respetará lo relacionado a la libre emisión del pensamiento y pretende sentar a los periodistas a “sacarles la información”.

Vayan a ver cómo han funcionado las cosas en la Nicaragua de Daniel Ortega y en la Venezuela de Nicolás Maduro y se darán cuenta que cada vez son más las similitudes.

En La Hora no vamos a dejar de hacer nuestro trabajo, a pesar que cada vez aumentan los intentos por acallarnos. Alejandra Carrillo nos acusó de violencia contra la mujer, tergiversando la figura que busca la protección de mujeres abusadas y ahora el MP quiere conocer las fuentes de información.

Cuando se camina por la sombra, cuando no se actúa de manera legal, es natural que se busquen acallar las voces incómodas. El periodista que escribió la nota no tiene por qué irse a sentar al MP a revelar nada, puesto que todo lo que documentó está publicado y la fuente de la noticia está en las filtraciones hechas públicas en las redes sociales

Pero hay una nueva tónica en contra de los medios que resultan incómodos y los ciudadanos deben decidir si quieren tener medios con libre acceso a las fuentes de información o solo a las fuentes que doña Consuelo, la Corte Suprema de Justicia (CSJ) o el presidente Alejandro Giammattei deseen.

Pedro Pablo Marroquín

pmarroquin@lahora.gt

Esposo, papá, abogado y periodista. ¡Si usted siempre ha querido un mejor país, este es su momento de actuar!

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