El Salvador no pudo pasar del empate 0-0 ante la vecina Honduras ayer, dejando escapar más puntos jugando en casa, al cumplir la segunda fecha del octagonal final de la CONCACAF rumbo al Mundial de Catar 2022.
El entrenador de los salvadoreños Hugo Pérez no movió sus piezas y mandó el mismo once que presentó en el empate 0-0 ante Estados Unidos el jueves pasado. Su equipo pasó problemas ante la potencia y velocidad de los catrachos, que sin embargo apenas inquietaron al portero local Mario González.
Honduras, en cambio, hizo nueve cambios con respecto al plantel que venía de empatar 1-1 de visita a Canadá. Su técnico uruguayo Fabián Coito apeló a Romell Quioto y Antony Lozano en la delantera, pero no tuvieron muchas oportunidades de gol. Quioto fue maniatado por la marca de Eriq Zavaleta y apenas jugó 45 minutos y fue reemplazado por Edwin Rodríguez, quien también pasó inadvertido.
Cuando El Salvador avanzaba en un contragolpe, a los 65 minutos, varios paneles de luz del estadio Cuscatlán se apagaron y el escenario quedó a media luz, por lo que el árbitro guatemalteco Walter López decidió parar el partido.
Las acciones se reanudaron 18 minutos después, pero nada cambió. Ni la Selecta, ni la H lograron imponer condiciones y el juego se diluyó en imprecisiones.
El Salvador presionó con todo en la agonía, pero Honduras tuvo la ocasión más clara con un frentazo de Bryan Velásquez a quemarropa que el portero salvadoreño sacó con un vuelo impresionante.
Pese a los dos empates sin goles en casa, el entrenador de La Selecta lució tranquilo tras el partido y afirmó que «esto empieza ahorita, no voy a entrar en pánico».
«Ahora tenemos que pensar cómo podemos mejorar para el partido del miércoles», cuando enfrenten a Canadá de visita.
Dijo que repitió el mismo plantel que enfrentó a Estados Unidos «porque el equipo que jugó el jueves no lo hizo mal. El único cambio que no teníamos previsto fue el de Zavaleta», que pidió el cambio en la parte final del encuentro. Explicó que el defensa central, bastión de la zaga salvadoreña, «estuvo enfermo el día anterior y se debilitó». No confirmó si será baja ante Canadá.
Por su parte, Coito señaló que «en el papel se debió de ganar. Fue un partido complicado por como llegamos, pero era importante no perder y evitar que El Salvador sumara en casa tres puntos».
«No sirve de mucho pensar en lo que no pasó; en esta gira por Canadá y El Salvador fueron dos empates diferentes». Afirmó que contra El Salvador «fue más lento; nosotros creíamos que con jugadores más frescos en el físico podíamos conseguir un buen resultado».
El Salvador, que suma dos puntos en dos partidos, enfrenta el miércoles a Canadá en Toronto. Honduras, con la misma cosecha, recibirá a Estados Unidos en San Pedro Sula.
El octagonal final otorgará tres boletos directos de la zona al Mundial y el pasaje al cuarto para un repechaje intercontinental.
El partido se jugó en el Cuscatlán con un aforo casi completo. Las autoridades de Salud Pública permitieron el ingreso de más de 30.000 aficionados que ya se aplicaron las dos dosis de la vacuna contra el coronavirus.