El gobierno británico dijo hoy que mitigará las normas de cuarentena para miles de trabajadores esenciales –guardiacárceles, veterinarios y recolectores de basura, entre otros– para tratar de paliar la escasez de personal que maniata sectores de la economía.
Unos 26 millones de británicos han descargado en sus teléfonos celulares una aplicación del servicio nacional de salud que les ordena aislarse durante 10 días si han entrado en contacto con una persona que ha dado positivo a COVID-19. Últimamente el Reino Unido ha registrado decenas de miles de casos nuevos por día, y las ausencias de empleados ha provocado trastornos en restaurantes y otros negocios y escasez en algunos estantes de los supermercados.
A partir del 16 de agosto, las personas totalmente vacunadas podrán someterse a pruebas diarias en lugar de aislarse. Pero muchos empresarios presionan a favor de un cambio más rápido.
La semana pasada, el gobierno dijo que los trabajadores de la alimentación y el transporte, así como el personal de fronteras, la policía y los bomberos podrá optar por las pruebas diarias. Ahora ha extendido el sistema a otros sectores como los recolectores de basura, guardiacárceles, veterinarios, recaudadores de impuestos y trabajadores de la defensa.
El gobierno dijo que se instalarán 2,000 sitios para responder a la demanda creciente de tests.
Una persona «marcada» por la aplicación es el primer ministro Boris Johnson, quien debió aislarse después que el secretario de Salud, Sajid Javid, dio positivo este mes. La cuarentena de 10 días de Johnson finalizó el lunes a medianoche.
Johnson dijo que comprendía la frustración de la gente, pero exhortó a todos a «seguir con el programa».
«Debemos utilizar las herramientas que tenemos. El autoaislamiento es la que tenemos. Exhorto a la gente a hacerlo», dijo.
Los que reciben la notificación de la app no están obligados por ley a aislarse. Hay informes de personas que han borrado la aplicación de sus teléfonos. La función de rastreo de la app se puede apagar.
Gran Bretaña levantó la mayoría de las restricciones, como el uso obligatorio de cubrebocas y los límites al aforo, el 19 de julio, a pesar de varias semanas de contagio creciente impulsado por la agresiva variante delta del coronavirus.