El gobierno holandés descartó hoy la realización de festivales de varios días este verano y endureció las reglas para las personas que regresan de las vacaciones con la esperanza de prevenir otro aumento en las infecciones por coronavirus.
El primer ministro interino, Mark Rutte, anunció las nuevas medidas hoy. Dijo que a pesar de que los casos confirmados están disminuyendo después de llegar a más de 10.000 por día este mes, «la situación sigue siendo tensa porque todavía vemos un aumento en los números de los hospitales».
Rutte informó que la prohibición de festivales de varios días hasta al menos el 1 de septiembre se debe en parte debido a dificultades logísticas para evaluar a todos los asistentes cada 25 horas. Agregó que la medida también da claridad a los organizadores del festival.
El gobierno también endureció las reglas para los vacacionistas que regresan. Todas las personas mayores de 12 años deberán presentar una prueba de virus negativa, que estén completamente vacunadas o se hayan recuperado de COVID-19.
El ministro de Salud, Hugo de Jonge, indicó que equipos móviles realizarán controles en las fronteras y los viajeros serán multados si regresan sin una prueba negativa o constancia de vacunación completa o de recuperación.
Poco menos del 60% de los adultos holandeses están completamente vacunados y el 83,5% ha recibido una inyección.