Jon Rahm arribó a Royal St. George como el recién coronado campeón de un major y con la oportunidad de unirse al grupo élite de golfistas que han ganado los campeonatos más antiguos en el mismo año.
Pero Rahm es distinto.
Ayer, en la antesala del Abierto Británico, reveló que hay una razón para su inusual backswing y no podría estar más lejos de todas las teorías que el español ha escuchado sobre que tiene las caderas «muy juntas».
«Nací con un pie deforme en del lado derecho», dijo Rahm, quien estaba dispuesto a revelar mucho más.
«Mi pierna derecha, hasta el tobillo está recto, mi pie está inclinado 90 grados hacia dentro y básicamente de cabeza», contó. «Cuando nací, básicamente lo reubicaron, prácticamente quebraron cada hueso del tobillo y tuve un yeso a los 20 minutos de nacido desde la rodilla hasta abajo. Creo que cada semana tuve que regresar al hospital para que me pusieran un nuevo yeso».
Rahm indicó que su pierna derecha es un centímetro y medio más corta que la izquierda, por lo que su movilidad y estabilidad en el tobillo derecho es reducida. Por eso mismo tiene un swing corto, lo que aprendió a una corta edad, un swing que lo ha llevado a estar entre los mejores golfistas del mundo al llegar al último major del año.
«No traten de imitarme», dijo. «No traten de imitar ningún swing. Usa tu propio swing».
Es único y funciona.
Rahm ganó su primer título en un major el mes pasado en Torrey Pines cuando se llevó el Abierto de Estados Unidos, con lo que regresó al número 1 del mundo por primera vez desde agosto de 2020. Retrocedió al segundo puesto esta semana, detrás de Dustin Johnson, aunque no hay duda de quién está en mejor forma.
En sus últimos cuatro torneos, desde el Campeonato de la PGA en mayo, Rahm ganó el US Open y dos veces terminó entre los mejores 10 y con seis tiros de ventaja tras 54 hoyos en el Memorial, cuando se tuvo que dar de baja tras dar positivo por COVID-19.
Hubo una sensación de alivio cuando finalmente se convirtió en campeón de un major.
«Sentí que gran parte de los últimos cinco años, lo único que es escuché fue major, major, major», indicó Rahm. Pero esto no alteró su determinación y enfoque antes de dirigirse al sur de Inglaterra para jugar en Royal St. George por primera vez desde 2009.
En aquella ocasión participó en el British Boys Championship, su primer torneo en un campo cerca de la costa.
«Siempre está el siguiente torneo que hay que ganar», reconoció Rahm, «Entonces siempre mantengo el mismo entusiasmo y ganas de triunfar».
Con un triunfo se convertiría en el primer jugador desde Tiger Woods en el 2000 que gana el US Open y el British Open el mismo año. Sólo Tom Watson, Lee Trevino, Ben Hogan, Gene Sarazen y Bobby Jones lo han logrado, por lo que Rahm se uniría a un selecto grupo.