La inflación en Estados Unidos posiblemente permanezca alta en los siguientes meses pero luego cederá, dijo hoy el presidente de la Reserva Federal Jerome Powell, reconociendo que las alzas de precios han sido mayores y más persistentes que lo anticipado.
En declaraciones preparadas para una interpelación ante la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, Powell reiteró su punto de vista de que la inflación de los últimos meses es un fenómeno transitorio provocado por escasez de productos y la súbita recuperación de la demanda a raíz de la rápida recuperación económica estadounidense a medida que se eliminaron las restricciones debido al coronavirus.
Sin embargo, el funcionario no repitió lo que dijo hace tres semanas ante otro panel del Congreso de que a medida que se disipen las causas de alzas de precios, la inflación «bajará otra vez» a la meta fijada por el banco central, de 2%.
Ayer se dio a conocer que los precios al consumidor en Estados Unidos tuvieron en junio su mayor aumento en 13 años, el tercer mes consecutivo con incremento. Si se excluyen las categorías más volátiles de alimentos y combustibles, la inflación subyacente fue de 4,5% en junio, la mayor desde noviembre de 1991.
Gran parte de los aumentos son en categorías impactadas por la reapertura económica y la escasez de suministros, por ejemplo, la venta de carros usados que conformaron un tercio del aumento. También se incrementaron los precios de habitaciones de hoteles, pasajes aéreos y alquileres de vehículos.
«El hecho de que las recientes presiones inflacionarias responden a unas cuantas categorías debería darle confianza a la directiva de la Fed en su punto de vista de que es mayormente un fenómeno transitorio, una apreciación aparentemente compartida por el mercado», expresó Michael Feroli, economista de JPMorgan Chase.
Pero algunas alzas podrían perdurar. Los precios en los restaurantes subieron 0,7% en junio, su mayor amento desde 1981, y se han incrementado en 4,2% comparado con hace un año. Esas alzas muy probablemente son para compensar los aumentos en costos laborales y los precios de insumos.
Aun así, Powell dice en el texto que la economía está prosperando y «está encaminada a registrar su mayor expansión en varias décadas».
Añadió que las contrataciones han sido «robustas» aunque «aun queda un gran trecho por recorrer», con el desempleo en 5,9%. Eso es indicio de que Powell favorece continuar la política del banco central estadounidense de mantener las tasas de interés casi en cero.