El sector turístico francés dio un paso más hacia la recuperación pospandemia hoy con la reapertura de Disneyland París, dos semanas después que el país reabriera formalmente sus fronteras a visitantes extranjeros que hayan sido vacunados.
El parque de diversiones más concurrido de Europa, en Marne-la-Vallee, al este de la capital francesa, abrió sus puertas luego de casi ocho meses de cierre. Personajes de Disney, bailando al son de alegres temas musicales, recibieron a la multitud.
«Fabuloso», dijo Debbie Tater, una residente de Delaware que viajó desde Estados Unidos para visitar a su familia, incluyendo su hija y dos nietas, que viven en Francia y a quienes no veía desde hacía un año y medio. «El lugar más feliz de la Tierra», añadió, con los ojos llenos de lágrimas.
«No podíamos perdernos la apertura», dijo Élodie Piedfort, de la región Haute-Loire del centro de Francia. «Soy enfermera, ha sido un año muy difícil y estar aquí con mi hijo es sensacional. Y la reapertura, seguir adelante también es sensacional».
Las medidas de seguridad vigentes incluyen el uso de la mascarilla y un límite al aforo para asegurar el distanciamiento social.
El primer ministro Jean Castex dijo el miércoles que Francia regresa a «una forma de vida normal» al anunciar que la población ya no tiene la obligación de llevar la mascarilla en espacios al aire libre, salvo en lugares de gran aglomeración.
El gobierno confirmó que los niños pueden quitarse la mascarilla en el patio de recreo, pero los niños de seis años en adelante deben usarla en el aula.
El domingo se levantará el toque de queda que rige desde las 11:00 de la noche hasta las 6:00 de la mañana.
El ministro de Salud, Olivier Veran, señaló el jueves que los clubes nocturnos podrán reabrir en julio bajo normas estrictas, algo que no sucedía desde marzo del año pasado, cuando se aplicó el primer confinamiento en Francia.
El sector turístico francés espera recuperarse durante el verano boreal a medida que regresan los visitantes extranjeros, siempre y cuando hayan recibido una de las cuatro vacunas aprobadas por la Unión Europea. Siguen vedados los visitantes de 16 países, entre ellos India, Sudáfrica y Brasil, que enfrentan picos de contagios y la aparición de variantes que preocupan a las autoridades.
La reapertura gradual de la economía comenzó en Francia el mes pasado. Los monumentos y museos, incluso los de gran concurrencia como el Louvre y Versalles, están abiertos, lo mismo que los hoteles, cafés y restaurantes,
Quienes quieran subir a la Torre Eiffel deberán esperar al 16 de julio, ya que es objeto de una gran renovación.
Más del 59% de la población en Francia ha recibido al menos una dosis de la vacuna y esta semana comenzó la vacunación del sector de 12 a 18 años.