Parlamentarios daneses votaron hoy a favor de que Dinamarca abra un centro de recepción de refugiados en un tercer país, probablemente en África, lo que podría ser un primer paso para llevar fuera de Europa el proceso de revisión de solicitudes de asilo del país.
La norma, aprobada con 70 votos a favor, 24 en contra y sin abstenciones, aunque con 85 parlamentarios ausentes, autoriza al gobierno danés a transferir solicitantes de asilo «al tercer país en cuestión con el propósito de un procesamiento sustancial de las solicitudes de asilo y cualquier protección consiguiente de acuerdo con las obligaciones internacionales de Dinamarca» una vez haya un acuerdo en vigencia.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, la Unión Europea y varias organizaciones internacionales han criticado el plan y afirmado que socavaría la cooperación internacional y no incluye detalles sobre cómo se protegerían los derechos humanos.
El ministro de Inmigración, Mattias Tesfaye, ha dicho que el gobierno danés necesitaba un marco legal para introducir un nuevo sistema de asilo antes de presentar los detalles. La oposición de centroderecha ha respaldado al gobierno minoritario socialdemócrata y votó a favor de la ley aprobada el jueves.
Los socialdemócratas llevan años barajando la idea de abrir un centro de refugiados en el extranjero. La primera ministra, Mette Frederiksen, reiteró su objetivo de campaña de tener «cero solicitantes de asilo».
Los socialdemócratas alegan que su estrategia disuadiría a la gente de emprender el peligroso viaje a través del Mar Mediterráneo para llega a Europa, y combatiría a los contrabandistas que se aprovechan de solicitantes de asilo desesperados. Más de 20.000 migrantes y refugiados han muerto en la travesía desde 2014.
Según el plan del gobierno, los solicitantes de asilo no podrían pedir asilo directamente en el centro de recepción fuera de Dinamarca, ya que eso sólo puede hacerse en la frontera de Dinamarca. En su lugar, las personas que llegan a Dinamarca serían enviadas a un tercer país mientras se procesan sus solicitudes.
El gobierno danés dijo en abril que había firmado un memorando de entendimiento con Ruanda. El gobierno ha manejado con discreción el memorando, que no es legalmente vinculante y establece un marco para negociaciones futuras y cooperación entre los dos países.
El diario danés Jyllands-Posten reportó que Copenhague también está en conversaciones con Túnez, Etiopía y Egipto.
