Por JOSEPH WILSON y ARITZ PARRA
BADALONA, España
Agencia AP
Los bomberos encontraron tres cuerpos en un complejo industrial abandonado en el noreste de España que era ocupado por inmigrantes y otras personas, después de que se incendió y se derrumbó parcialmente, mientras continuaban las labores de emergencia con ayuda de perros rastreadores y drones ayer para determinar si había más personas en su interior.
El incendio iniciado el miércoles por la noche en Badalona, un suburbio de 200.000 habitantes al norte de Barcelona, también dejó al menos 19 heridos, entre ellos tres que se encontraban en estado crítico, informaron las autoridades.
El presidente regional en funciones de Cataluña, Pere Aragonés, dijo que hasta el momento han sido localizadas aproximadamente 60 personas que estaban en el lugar, pero se cree que el edificio pudo haber estado ocupado por más de 100 personas en el momento del incendio.
Los bomberos seguían trabajando el jueves para extinguir las llamas y estabilizar la estructura a fin de ingresar con seguridad, informó Aragonés a la televisora estatal española TVE. Las autoridades usaban varios drones y perros rastreadores para buscar a otras personas que pudieran estar atrapadas en zonas inestables del complejo.
Uno de los sobrevivientes, Matiga Thiam, dijo a The Associated Press que ha estado buscando a su amigo cercano desde que las llamas se propagaron en una de las cuatro secciones del complejo.
Thiam halló refugio en el complejo luego de llegar procedente de Italia hace seis meses. Él y el también senegalés Ousmane Ndiaye, que ha vivido en España desde hace 14 años, dijeron que han estado sobreviviendo con el poco dinero que obtienen recolectando chatarra.
Ndiaye calculó que cerca de 150 personas originarias de Senegal, Ghana, Gambia y otros países vivían en el complejo debido a que conseguir una vivienda es difícil, especialmente para migrantes que aún buscan regularizar su permanencia en Europa.
Ambos señalaron que no podían dejar de recordar lo que vieron mientras huían del edificio en llamas, al tiempo que otros ocupantes saltaban desde ventanas del segundo piso.
El presidente regional añadió que se cree que muchos de los ocupantes estaban en España sin permiso de residencia y habían huido sin recibir atención médica en cuanto escaparon de las llamas.
«Se ha producido una tragedia por encima de la miseria económica en la que ya se encontraban muchas de las personas», dijo Aragonés a TVE.
Algunas de las personas que se habían instalado allí buscando cobijo eran inmigrantes africanos, según medios locales.
Las autoridades investigarán si el incendio fue accidental o deliberado, informó el ministro regional del Interior, Miquel Sámper.
La mayoría de los lesionados fueron atendidos por traumatismo luego de saltar del edificio para escapar de las llamas, detalló el coordinador de emergencias Francisco Tebar a TVE. Unas 30 personas fueron rescatadas de ventanas antes que el techo se viniera abajo en varias partes del inmueble.
El edificio llevaba al menos ocho años ocupado, dijo Xavier García Albiol, alcalde de Badalina, añadiendo que el Ayuntamiento había iniciado las labores para vaciar el edificio después de que aumentaran el tráfico de drogas y los robos menores en la zona durante los últimos dos años, provocando problemas con otros vecinos.
