Por PAUL WISEMAN
WASHINGTON
Agencia AP
Los pedidos de prestaciones por desempleo en Estados Unidos aumentaron por segunda semana consecutiva a 778.000, señal de que la economía y el mercado laboral sufren el rebrote del coronavirus y el tiempo frío acrecienta los riesgos.
El informe del Departamento de Trabajo el miércoles. Antes del brote del virus en marzo los reclamos semanales llegaban apenas a 225.000. Subieron a 6,9 millones en marzo y luego cayeron, pero ocho meses después permanecen en niveles históricamente altos, ya que muchas empresas no pueden reabrir.
El aumento de los casos acrecienta las presiones sobre empresas e individuos, y crecen los temores de una «recesión de doble caída» a medida que estados y ciudades vuelven a imponer restricciones a los negocios.
El número total de personas que siguen recibiendo las prestaciones por desempleo tradicionales de los estados bajó a 6,1 millones comparado con 6,4 millones la semana anterior. Esa cifra ha estado bajando durante meses. Revela que más personas consiguen empleo y ya no requieren ayuda. Pero también indica que más personas sin empleo han dejado de recibir ayuda, que típicamente dura seis meses.
Más personas están recibiendo prestaciones bajo programas creados para paliar las penurias de la epidemia. En la semana del 7 de noviembre, el número de beneficiarios del programa Asistencia al Desempleo por la Pandemia —que cubre a trabajadores temporarios y otros que no reciben ayuda tradicional— aumentó en 466.000 a 9,1 millones.