CIUDAD DE MÉXICO
Agencia AP
La Iglesia católica en México censuró ayer la aprobación en el Senado de una iniciativa para legalizar la posesión, el cultivo y el consumo de pequeñas cantidades de marihuana.
La medida aprobada el jueves será turnada ahora a la Cámara de Diputados para su examen y votación.
La iniciativa legalizaría la posesión de 28 gramos (una onza) de marihuana por parte de adultos siempre y cuando no la consuman frente a niños. También autorizaría el cultivo de un máximo de seis plantas por persona y abriría el camino al establecimiento de un sistema de permisos para la producción y venta a mayor escala.
La Conferencia del Episcopado Mexicano pidió el domingo a la Cámara de Diputados «que modifique la iniciativa de modo que se privilegie la salud y la seguridad públicas».
«La iniciativa aprobada no atiende los daños a la salud surgidos por el consumo cada vez mayor de la marihuana, no atiende los efectos en las familias, por los jóvenes que consumen drogas, tampoco contribuye a inhibir y reducir la exposición a sustancias estupefacientes», afirmó la CEM en un comunicado.
La Iglesia señaló que, con la aprobación de la iniciativa, «la salud y el bien común dejan de constituir un bien prioritario, y ceden su lugar a los gustos de individuos aunque pudieran causar un daño a terceros».
Quienes apoyan la medida alegan que ésta ayudará a quitar la comercialización de la marihuana a los violentos cárteles del narcotráfico, a los que la planta les sigue generando fuertes ganancias ilícitas.
Desde hace años, la Suprema Corte ha concedido amparos que permiten a individuos cultivar marihuana para el autoconsumo.