MADRID
Agencia DPA/Europa Press
La Fiscalía mexicana acusó ayer al expresidente Enrique Peña Nieto de «traicionar a la patria» por estar involucrado en una trama de corrupción relacionada con la constructora brasileña Odebrecht.
En un comunicado, los fiscales han señalado que el exmandatario jugó un «papel central en la comisión de los delitos de cohecho, traición a la patria y delito electoral, lo que puede asumirse sobre la base de proposiciones empíricas generales».
Peña Nieto logró en 2012 el regreso del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la Presidencia, perdida en el año 2000 tras siete décadas en el poder. Durante su mandato «los hechos delictivos de cohecho y traición a la patria surgieron por disposición de él mismo», ha aseverado la Fiscalía, encabezada por Alejandro Gertz Manero.
El exmandatario, de 54 años y residente en España, habría cometido los ilícitos «utilizando como instrumento» a dos altos cargos que lo acompañaron desde la campaña electoral para llegar a la Presidencia.
Estos funcionarios son Luis Videgaray, exministro de Hacienda y Exteriores, que reside ahora en Estados Unidos, y Emilio Lozoya, que fue director de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), detenido en España en febrero de este año y extraditado a México.
Según el texto de la Fiscalía, el expresidente «contaba con su propio aparato de poder criminal, con cuya ayuda implementó una estrategia de cooptación de la voluntad de los legisladores encargados de la aprobación de sus reformas estructurales en materia energética», aprobada en diciembre de 2013.
El delito de cohecho se habría cometido cuando, por supuestas órdenes de Peña Nieto, Videgaray distribuyó «a través de interpósitas personas» 121,5 millones de pesos (unos 6 millones de euros), entre legisladores del Congreso.
Los destinatarios habrían sido un legislador del PRI, David Penchyna, y tres del opositor Partido Acción Nacional (PAN), Ernesto Cordero, Jorge Luis Lavalle y Ricardo Anaya.
Anaya sería candidato presidencial en 2018, en la contienda que ganó el actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, en su tercera campaña electoral.
Los gerentes de Odebrecht declararon a la Fiscalía de Brasil, bajo la figura de «delación premiada» para aminorar sus penas, acerca del pago de 10,5 millones de dólares para la campaña de Peña Nieto en 2012, y la obtención de contratos con la petrolera estatal Pemex cuando se convirtió en presidente.
López Obrador explicó a principios de noviembre que un juez federal mexicano devolvió a la Fiscalía General el documento judicial «porque consideró que no estaba bien integrada la averiguación o la solicitud que se estaba haciendo».
Videgaray se desempeña actualmente como profesor del Instituto Tecnológico de Massachusetts en el noreste de Estados Unidos, donde en septiembre pasado algunos alumnos exigieron su destitución por carecer de «autoridad moral», pero la institución académica descartó la petición.