Edith González
Pese a que vemos las calles con tráfico denso, los centros comerciales abiertos. Y cada día escuchamos de más personas que han dejado el miedo atrás y piensan que ya no es posible contagiarse, enfermarse y menos morir, por lo que algunos definen como una gripe fuerte, que está afectando de plano a los más débiles, “pero no a mí”.
Los números de contagios en nuestro país y el mundo continúan al alza, como el número de personas fallecidas. La apertura del país ha sido beneficiosa para unos, no para todos, como comenta Isabel Trejo del sindicato de músicos
“La pandemia por Covid-19, continúa teniendo un impacto significativo, tanto a nivel humano como económico. Las organizaciones artísticas de las diferentes ramas del arte en nuestro país afrontan el reto de adaptar estrategias, implementar soluciones tecnológicas y poner en marcha planes de continuidad para dar respuesta a las necesidades de los afiliados o socios de las mismas.
Con la evolución de la crisis, es imprescindible que el Sindicato de Músicos Unidos de Guatemala trabaje, participe y se adapte en trabajos que no sean directamente artísticos, para responder de forma adecuada al actual entorno. Para facilitar esta labor se necesita de un sistema estructurado, tomando en cuenta cuatro aspectos importantes: La reacción, resiliencia, recuperación y una nueva realidad.”
Sin embargo esa realidad que en este momento enfrentan los artistas en general, parece dejar de lado el arte, uno de los primeros en retirar de la lista ante cualquier eventualidad y no digamos en estos momentos en que los distanciamientos son obligatorios y se habla de sitios cerrados, donde se producen los espectáculos artísticos, como los peores, o mejores lugares para contagiarse.
Unos grupos han ido encontrando la manera de comunicarse utilizando los medios que la tecnología va poniendo al alcance de pocos. Algunos artistas lograron afiliarse a los programas sociales del gobierno, lo que la Junta Directiva del Sindicato de Artistas agradece a la presidencia y a todos los que los han ayudado, sin embargo el arte en estos momentos parece haberse tomado “el sabático de la pandemia”.
Aunque ahora que llegan las fiestas de fin de año y hemos encontrado nuevas formas de comunicarnos, quizás empecemos a tener más manifestaciones artísticas en la nueva realidad. La señora Trejo dice “el desafío es positivo, es bueno que las personas se pongan a prueba para crecer y progresar en lo que saben hacer, en este caso explotar el talento artístico y otras capacidades.”
Sin embargo eso representa recursos: conocimiento, creatividad y tecnología al alcance lo que para los artistas populares marimbistas, mariachis, cómicos, pintores, magos… representa un valladar.
Esperemos que luego de este obligado descanso, los artistas populares puedan levantarse y mostrarnos toda nuestra tradición en su inspiración.
Felicidades a todos los artistas que el 27 de este mes celebraron su día, en homenaje a los artistas accidentados en el Petén en 1951 y para el cual el recordado maestro Carlos Ovalle se dio a la tarea de lograr institucionalizar El día del artista nacional.