Juan José Narciso Chúa
El día de ayer, Oscar Clemente Marroquín, en su calidad de Director General del Diario La Hora, nos compartió a los columnistas de este diario, una serie de información sobre encuestas que ha realizado el diario, con la vista puesta en el futuro, lo cual ha permitido que la Hora, sea hoy por hoy, un periódico de avanzada y que cuente con el mejor formato en el medio, así como haya incorporado un grupo heterogéneo de columnistas, pero que coinciden todos, con buscar un cambio para nuestra sociedad.
El Diario La Hora, tiene un enorme significado para este columnista, pues fue en el primer medio impreso en donde pude publicar mi primera columna, la cual se mantuvo por un buen tiempo, cuando la misma se orientaba fundamentalmente a la economía, una disciplina científica que constituye uno de mis perfiles profesionales más importantes.
Luego, después de una plática informal con Oscar Clemente, cuando compartíamos el pesar del fallecimiento de Don Alfredo Balsells Tojo, en su funeral, convenimos en retornar a La Hora como columnista del medio y le dije que me comprometía a dos columnas mensuales y le agradecí su invitación.
Eso fue un punto de inflexión en mi vida, lo cual agradeceré profundamente a Oscar Clemente y a Pedro Pablo, pues me abrieron las puertas y se convirtió en un quehacer sumamente importante para mí, pues hoy ya llevamos una década juntos y es un placer, además, coincidir con la línea editorial de este centenario medio de comunicación escrita que se ha introducido también en el ámbito de la tecnología de redes. Las columnas ciertamente ya no fueron quincenales sino semanales, agradablemente.
Para mayor satisfacción, hace un tiempo todo el mundo se enteró de la incorporación de Luis von Ahn como socio de este prestigioso diario, un elemento que suma, que otorga valor agregado al Diario La Hora, cuando se prepara a encarar el futuro, abriendo la estructura de capital de un medio familiar para tornarse hacia una corporación que cuida las nuevas incorporaciones como la de Luis von Ahn.
Luis von Ahn, no es únicamente un genio de la tecnología, quien nos ha asombrado y enorgullecido con su desempeño a nivel internacional, un lujo de guatemalteco sí, pero además, no termina ahí, él es un genio sin duda, pero comprometido con su sociedad y eso lo hace distinto, pues configura a una persona que más allá de sus empresas exitosas, quiere un cambio para nuestra sociedad y ha tenido la valentía de plantear sus puntos de vista, aún en contra del conservador establishment, que impera en este país y quienes continúan en su lucha por apropiarse de las instituciones y del Estado mismo pero únicamente para sus intereses.
Bienvenido Luis von Ahn, a esta casa común, a este medio que camina y caminará -con su indiscutible apoyo-, hacia un mejor futuro, personas como usted y otras jóvenes figuras que buscan otra sociedad, que entienden que dar es mejor que recibir, son las que construyen el nuevo derrotero de nuestro país.
Oscar Clemente junto con Pedro Pablo, han hecho un cambio fundamental también para su medio, que ya cuenta con 100 años de gloria y de lustre. Uno de los párrafos que me gustó y llamó mucho la atención, que nos compartió Oscar Clemente el día de ayer, al cual me adscribo sin dudarlo, señala lo siguiente:
“La Hora es un medio que tiene el compromiso de empoderar a la gente con información en busca de una opinión pública que influya en la transformación de Guatemala para dejar atrás una cultura de corrupción e impunidad y abrirnos para ser un país que ofrezca no sólo inclusión sino oportunidades para todos”.
Así que, junto a La Hora, mi casa como columnista, y Luis von Ahn, seguiremos en la lucha por informar para propiciar grandes transformaciones, el futuro para nosotros es un reto.
