La OPS se refirió hoy a las medidas de distanciamiento social y el relajamiento de estas en algunos países. En la imagen personas en Nueva York usan mascarillas y tratan de guardar distancia. Foto La Hora/Bebeto Matthews/AP

Por Grecia Ortíz
gortiz@lahora.com.gt

La directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) Carissa F. Etienne, advirtió a los países que reducir las medidas de distanciamiento, “demasiado pronto”, podría acelerar la propagación del virus y abrir la puerta a un aumento dramático de su propagación incluso en áreas adyacentes.

A decir de Etienne, para pensar en lo anterior, los países deben analizar las tendencias específicas de la pandemia del nuevo coronavirus según sus contextos unidos, antes de que se flexibilicen medidas.

Desde que se informó el primer caso de COVID-19 en las Américas hace más de tres meses, el virus se ha propagado a todos los países de la región, lo que ha provocado más de 1,4 millones de casos y más de 86 mil muertes hasta el 4 de mayo, refirió.

CENTRO AMÉRICA DEBE AUMENTAR SU CAPACIDAD DE PRUEBAS

Etienne, explicó que en muchas áreas de la región el número de casos se duplica en pocos días, como sucede en Estados Unidos, Canadá, Brasil, Ecuador, Perú, Chile y México.

“Este es un indicador preocupante que nos dice que la transmisión es aún muy alta en esos países, y que deben implementar toda la gama de medidas de salud pública disponibles: pruebas exhaustivas, seguimiento de contactos, aislamiento de casos y, por supuesto, distanciamiento físico”, afirmó.

La representante de la OPS agregó que es necesario que en América del Norte se mantengan medidas especiales que puedan proteger a los grupos más vulnerables, en particular en lugares en donde el virus no ha impactado aún.

En el caso de Centro América, aseguró que es imperativo que se aumente la capacidad de pruebas y que en América del Sur aumenta la preocupación por más casos que se reportan desde pueblos pequeños, que tienen una capacidad hospitalaria limitada.

En el Caribe, dijo, la mayoría de los países parece estar en el comienzo de sus brotes, pero han implementado medidas estrictas de salud pública que en algunos casos parecen tener un impacto en disminuir la diseminación del virus.

También se refirió a las pruebas de coronavirus y su aplicación en Centroamérica. Foto: La Hora/AP/Ilustrativa

CUALQUIER DECISIÓN DEBE BASARSE EN DATOS

Por ello, destacó que cualquier decisión que se tome en los países debe estar basada siempre en datos.

«Analicen las tasas de nuevos casos y de muertes, evalúen la capacidad de camas en los hospitales y determinen qué les dicen sobre la propagación del virus», instó.

Además, anotó que la presión social y económica que se está viendo, será mayor si no se contiene el virus y si se eliminan las medidas de control de forma prematura y se abruma la capacidad de los sistemas de salud.

Por otro lado, manifestó su “especial preocupación” por Haití en el contexto de la pandemia, y advirtió sobre los peligros de un brote a gran escala en ese país, algo que sumado a la difícil situación que atraviesa, podría desencadenar una crisis humanitaria.

La Directora de la OPS señaló que la mayoría de los haitianos no tienen acceso a agua potable y saneamiento, y «muchos viven en hogares superpoblados donde la cuarentena y el aislamiento son desafiantes”.

Etienne, dijo, “existe el riesgo real de que la creciente inseguridad alimentaria provoque hambruna. Los disturbios civiles, una situación política difícil y la seguridad precaria pueden complicar aún más la situación».

«Analicen las tasas de nuevos casos y de muertes, evalúen la capacidad de camas en los hospitales y determinen qué les dicen sobre la propagación del virus»

Carissa F. Etienne, directora de la OPS

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