Por Grecia Ortíz
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Anoche, la Casa del Migrante de los misioneros Scalabrinianos recibió a 42 migrantes que llegaron al país como parte del Acuerdo de Tercer País Seguro firmado por el Gobierno de Jimmy Morales y el de Donald Trump en julio pasado, según informó el presbítero y director de Casa del Migrante en Guatemala y El Salvador Mauro Verzeletti.
Este se caracteriza por ser el grupo más grande que se ha recibido en Guatemala bajo esta modalidad.
En el lugar, los migrantes reciben alimentos y un techo en donde quedarse, sin que para ello reciban recursos del Estado. De acuerdo con Verzeletti en el grupo de hondureños y salvadoreños también hay varios niños pequeños.
CASA DEL MIGRANTE = AYUDA HUMANITARIA
Ayer Verzeletti denunció que habían recibido amenazas telefónicas como consecuencia del trabajo humanitario que han realizado en los últimos días con las caravanas migrantes.
El papel del albergue en las caravanas de 2018 y la registrada la semana pasada, ha sido vital para los migrantes que han encontrado un alivio en su travesía.
Según explicó Verzeletti, de momento aún no han obtenido respuesta a su petición de recibir seguridad como parte de las medidas planteadas por las amenazas que les hicieron el lunes por la tarde y por la mañana.
En tanto, el Procurador de los Derechos Humanos, Jordán Rodas, condenó enérgicamente las amenazas “cobardes”, de las que están siendo víctimas tanto Verzeletti como el equipo de Casa del Migrante.
“Es la entidad más solidaria a los migrantes en Guatemala cuyo trabajo se reconoce a nivel nacional e internacional, esperando que el Ministerio Público investigue y de con los responsables porque no es justo que personas de bien estén siendo amedrentadas”, anotó.
JUEGAN UN PAPEL FUNDAMENTAL PARA LOS MIGRANTES
Al respecto, la directora del Instituto de Investigación y Proyección sobre Dinámicas Globales y Territoriales (IDGT) de la URL, Úrsula Roldan, expresó que estas amenazas resultan preocupantes, porque Casa del Migrante juega un rol fundamental para las personas que pasan por el país.
“La asistencia que ellos dan es humanitaria, también le han podido brindar otros servicios entre médicos y sicológicos incluso ellos también tienen un apoyo fuerte en algunas actividades con niñez, para mí son un referente por la forma en que apoyan a los migrantes en Guatemala”, dijo.
Estos ataques, dijo, que se ven como un mecanismo para seguir combatiendo el tema migratorio, lo que puede calificarse a su parecer como antiético, antihumano y anti todo.
Por ello, aseveró que es necesario que se les brinde protección ante las amenazas que han recibido, “si se tendría que tener una situación de prevención por lo menos que haya policías que les brinden seguridad perimetral y que el Ministerio Público investigue la amenaza”.
Ayer, tras conocerse de la denuncia del padre Verzeletti, el Instituto Guatemalteco de Migración reconoció el apoyo de la Casa del Migrante, además, solicitaron seguridad para que la entidad continúe con su labor.
