Por Cristian Velix
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La Sala Tercera de Apelaciones, integrada por magistrados suplentes, rechazó dos recursos de apelación interpuestos por la jueza Erika Aifán, titular del Juzgado de Mayor Riesgo “D”, con los cuales buscaba que Tatiana Elizabeth Guzmán Figueroa enfrentara proceso penal por filtración de información de la judicatura que ella dirige.
De esa manera, los togados Edith Pérez, Gloria Suchite y César Najarro declararon sin lugar la primera apelación con la que Aifán buscaba constituirse como querellante adhesivo en el expediente en contra de la auxiliar judicial.
Los magistrados indicaron que la jueza no es víctima de los hechos ilícitos en los que pudo haber incurrido Guzmán Figueroa, ya que ella debería haber sufrido daños físicos o mentales, o menoscabo en su patrimonio.
Pérez, Suchite y Najarro resolvieron que quien resulta afectada por el delito presuntamente cometido por la exoficial del Juzgado de Mayor Riesgo “D” es la administración pública o administración de justicia, que como órgano del Estado debe ser representado por el Ministerio Público (MP).
“La jueza denunciante cumplió al poner en conocimiento del MP los hechos que consideró como delictivos, pero en ningún momento puede considerarse como víctima del delito o agraviada y al no tener esa calidad, no puede ser querellante adhesiva”, detallaron los magistrados suplentes.
En ese contexto, al denegarse la petición de Aifán de ser parte del proceso que se dilucida en contra de auxiliar judicial, la Sala no entró a conocer la otra apelación, con la cual la juzgadora buscaba revocar la resolución del 5 de octubre del año pasado, cuando la auxiliar judicial fue dejada en libertad al dictarse la falta de mérito a su favor por los hechos que ella denunció.
“La falta de mérito no cierra de manera irrevocable la acción iniciada, es responsabilidad de la institución encargada de la persecución penal continuar con la investigación y la juzgadora puede colaborar con dicha institución”, puntualizó en su resolución los togados.
HECHO
Aifán indicó en su momento que su antigua oficial -trasladada a otra judicatura por la Corte Suprema de Justicia (CSJ)- pudo haber incurrido en siete delitos, por intentar sustraer documentos en original y copia del Juzgado de Mayor Riesgo “D”; uno de ellos estaba alterado.
De igual manera, la jueza señaló que Guzmán Figueroa la grababa ilegalmente y de perder un conjunto de actuaciones que componen el Caso Fénix, mismo en el que sigue sin resolverse la situación jurídica de varios sindicados.
