Drew Brees (9), quarterback de los Saints de Nueva Orleáns, sostiene piernas de pavo junto a sus compañeros, tras la victoria sobre los Falcons de Atlanta. FOTO LA HORA: CURTIS COMPTON/ATLANTA JOURNAL-CONSTITUTION /AP.

Por CHARLES ODUM
ATLANTA
Agencia (AP)

Taysom Hill brilló como nunca. Lo hizo en el Día de Acción de Gracias y en un duelo clave para los Saints.

Hill bloqueó un despeje y anotó en dos ocasiones, para que Nueva Orleáns conquistara su tercer título consecutivo en la División Sur de la Conferencia Nacional, al derrotar ayer 26-18 a los Falcons de Atlanta.

Hill atrapó un pase de tres yardas para anotar, en la serie que siguió al despeje tapado. Más tarde, llegó a las diagonales en un acarreo de 30 yardas.

Se robó el espectáculo, en un equipo repleto de estrellas más reconocibles.

«Cuando uno tiene a jugadores como Mike Thomas, Alvin Kamara, Jared Cook y otros en la lista, ello genera oportunidades para gente como yo, porque se pone mucha atención a esos chicos», comentó Hill. «El entrenador (Sean Payton) es uno de los mejores a la hora de ser creativo y de colocar a los chicos en posiciones en las que puedan tener éxito. Tengo suerte, porque esta noche yo fui ese chico».

En un encuentro del que se ausentó Julio Jones por una lesión de hombro, los Falcons no tuvieron ataque para seguirles el paso a Drew Brees y a los Saints. Atlanta recuperó dos patadas cortas en los últimos minutos, incluida una con 1:54 por jugarse, para poner el duelo interesante.

Matt Ryan fue capturado por Cameron Jordan en cuarto down y sobre la yarda 44 de Nueva Orleáns, cuando faltaban 38 segundos. Fue la novena captura sufrida por el quarterback, incluidas cuatro a manos de Jordan.

«Tuvimos que retroceder y pasar al final del partido», comentó Ryan. «Cuando haces eso y no hay realmente una amenaza de acarreo, la situación es difícil, particularmente ante una buena defensa, una estupenda línea y Cam Jordan, uno de los mejores a la hora de presionar».

Los Saints (10-2) se repusieron del revés por 26-9 que les propinaron en casa los Falcons el 10 de noviembre. Aquélla fue la única derrota de Nueva Orleáns en sus últimos 10 compromisos.

El versátil Hill bloqueó un despeje de Ryan Allen para poner fin a la primera posesión de Atlanta. Los Saints quedaron en la yarda 30 de los Falcons y, cuatro jugadas después, Hill consiguió su primer touchdown, gracias a un envío corto de Brees.

Hacia el final de la primera mitad, recibió directamente el centro y corrió 30 yardas para su primera anotación por tierra en la campaña. Nueva Orleáns tomó así la ventaja por 17-6.

Los decepcionantes Falcons (3-9) siguieron en el sótano de la división, tras sufrir su segunda derrota consecutiva en casa.

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