Por CHRISTOPHER BODEEN,
LUDIAN,
Agencia AP
Mientras tanto, voluntarios como el estudiante Jackson Zeng usaban sólo sus manos.
Zeng se unió a un grupo de dos docenas de compañeros de clase que se dirigieron al condado de Ludian, en la provincia de Yunnan, donde el terremoto de 6,1 grados del domingo derribó miles de viviendas en una región empobrecida de terrenos agrícolas en las montañas.
«Crecí en los alrededores y esta es mi gente. No estoy seguro de lo que pueda hacer, pero ayudaré de cualquier forma que esté a mi alcance», dijo Zeng, estudiante de tercer grado en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Kunming.
Su camiseta negra contrastaba con la gran cantidad de tropas de uniforme verde a lo largo del camino principal que conduce a la zona donde azotó el terremoto. Paramilitares con una retroexcavadora y otra maquinaria pesada despejaban tierra desde un tramo de camino afectado por un deslave, mientras que Zeng y otros estudiantes utilizaban sus manos para empujar piedras por un acantilado.
Muchos cientos de voluntarios se han reunido en la ciudad cercana de Zhaotong para dirigirse de allí a las áreas afectadas por el terremoto, un fenómeno típico durante desastres en China. Muchos de ellos llegaron con las manos vacías, pero algunos formaban parte de unidades patrocinadas por compañías, las cuales incluían uniformes y su propia ayuda humanitaria para distribuir.
El gobierno también ha enviado miles de tiendas, mantas, bolsas de dormir y abrigos de algodón a la zona, así como catres, sillas, mesas y retretes portátiles.
El movimiento telúrico afectó un área de colinas empinadas y caminos angostos inadecuados para el tránsito generado por el esfuerzo masivo de ayuda, y las intensas lluvias del martes incrementaron las complicaciones. Gran parte de los daños se debieron a deslaves.
Ambulancias, palas mecánicas y camiones llenos de agua y fideos, así como los equipos de voluntarios, atestaban el camino principal que va al poblado de Longtou, el más afectado, ubicado a unos 370 kilómetros (230 millas) al noreste de Kunming. Algunos helicópteros llevaron suministros a las áreas más alejadas.
La Oficina de Asuntos Civiles de Yunnan informó el martes que 410 personas perdieron la vida y 2.373 resultaron heridas, mientras que 12 siguen desaparecidas unas 48 horas después del terremoto. En los primeros dos días, los rescatistas extrajeron a decenas de personas atrapadas entre los escombros.