La Magistrada Beyla Estrada de Brito, se excusó de conocer el antejuicio contra la jueza Erika Aifán, argumentando que existía “enemistad” entre las partes. Foto: La Hora.

Por: Cristian Velix
cvelix@lahora.com.gt

La Sala Segunda de Mayor Riesgo resolvió que no hubo detención ilegal de Tatiana Elizabeth Guzmán Figueroa cuando fue capturada el 5 de octubre pasado, esto por supuestamente intentar sustraer documentos del Juzgado de Mayor Riesgo “D”, alterar uno de ellos y grabar a la jueza Erika Aifán.

La decisión se da luego que ese órgano jurisdiccional analizara las dos exhibiciones personales (para determinar si la persona estaba detenida de forma ilegal), las cuales fueron planteadas a favor de la auxiliar judicial, sin embargo, ambas fueron declaradas sin lugar.

La resolución de la Sala contradice lo señalado por el juez Mario Martínez, quien, al momento de dejar en libertad a Guzmán Figueroa, ordenó que se investigara a las personas que participaron en la supuesta detención ilegal de la antigua oficial del Juzgado de Mayor Riesgo “D”.

Anteriormente, Aifán explicó que durante las diligencias que terminarían en la aprehensión de la trabajadora del Organismo Judicial (OJ) se practicaron dos exhibiciones para ella y una para Pedro Luis Hernández Debroy, notificador en ese entonces de esa judicatura.

De esa manera, la juzgadora afirmó que, en la primera de ellas, el juez que práctico la diligencia pudo constatar que ninguno de los dos estaba detenido ilegalmente, mientras que, en la segunda, se le permitió a Guzmán Figueroa que se comunicara con su familia en horas de la noche, sin restricción de tiempo para hacerlo.

Tanto la auxiliar judicial como Hernández Debroy fueron removidos del juzgado a cargo de Aifán, luego que la Corte Suprema de Justicia (CSJ) ordenara su traslado a un juzgado de Villa Nueva, en el caso de Guzmán Figueroa, mientras que el notificador fue enviado al Juzgado Décimo Quinto de Instancia Civil.

HECHOS

La jueza explicó respecto a lo sucedido que le manifestó a Helmut Pérez, jefe interino de la Dirección de Seguridad del OJ, que tenía sospechas que la exoficial de su judicatura tuviera grabaciones de ella en su teléfono, razón por la que él pidió que los agentes de seguridad de ese Organismo que lo custodiaran, luego de que Guzmán Figueroa se negara a mostrar su celular.

Según la juzgadora, se pudo constatar en la reproducción de algunas de las grabaciones que podía escuchar su voz, pero que, al momento de revisar la bolsa de la auxiliar judicial, cuya acción realizó una agente de seguridad del OJ, se encontró un folder con documentos que son propiedad del juzgado.

En la diligencia participó el Ministerio Público (MP), la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) y la Supervisión General de Tribunales, afirmó Aifán, no obstante, a la exoficial de la judicatura se le dictó falta de mérito.

La jueza apeló ese fallo y solicitó constituirse como querellante adhesivo en la investigación, pero dichos recursos aún están pendientes de resolverse.

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