Félix Loarca Guzmán
En el curso de los últimos años, han existido importantes avances para derribar los muros de los monopolios de la comunicación internacional, sobresaliendo el fenómeno de las redes sociales como Facebook, Twitter e Instagram.
La experiencia y necesidades nacionales y subregionales reafirman la importancia y la necesidad de continuar en la tarea a favor de un nuevo orden informativo internacional, labor íntimamente ligada a la justa exigencia de los pueblos en vías de desarrollo por un nuevo orden económico internacional.
Es un hecho público que la comunicación es manejada actualmente por seis u ocho agencias y canales de TV internacionales de noticias, con sede en los llamados países del primer mundo como Estados Unidos, Inglaterra, Francia y España, que fácilmente han sido utilizados como instrumentos de manipulación informativa a favor de determinados intereses políticos y económicos.
Mediante ese mecanismo, tales agencias y canales de televisión, han contribuido al desprestigio de gobiernos progresistas como los casos del presidente Luiz Inácio Lula en Brasil, Cristina Fernández en Argentina y Rafael Correa en Ecuador. Actualmente las baterías están dirigidas para desprestigiar y desestabilizar a los gobiernos de Venezuela del presidente Nicolás Maduro, Daniel Ortega de Nicaragua y Evo Morales de Bolivia.
Ahora se están intensificando esfuerzos para romper esas barreras de la comunicación. Uno de ellos que ha alcanzado mucho éxito es la existencia de la cadena internacional de televisión Telesur, creada hace 14 años por iniciativa del entonces presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Comandante Hugo Chávez y por el presidente de Cuba, Fidel Castro, como un vehículo destinado a promover la integración de los países de la región.
Esta televisora tiene su sede en la ciudad de Caracas, y gradualmente se ha convertido en el más importante instrumento para romper la hegemonía de poderosos medios locales e internacionales de comunicación financiados por el gran capital. Sin duda, es una herramienta muy valiosa para unificar a los pueblos no solo de América sino del mundo entero.
Telesur es un ladrillo para la construcción de un nuevo orden de comunicación. Es una iniciativa en contra del imperialismo cultural con noticieros cada hora, documentales, de debate, producciones educativas, de tecnología, derechos humanos, de salud, de protección del medio ambiente, reportajes sobre la verdad de la explotación minera e investigaciones periodísticas en general. Sus programas se ven y se escuchan actualmente en casi todos los países del mundo con un enfoque diferente y sin anuncios de empresas comerciales.
Uno de los retos más importantes de esta televisora, ha sido demostrar al mundo cómo algunos de los medios de comunicación de los países occidentales como Estados Unidos, llevan a cabo un sutil pero perverso proceso de manipulación de la mente de los destinatarios de sus mensajes, al disfrazar la propaganda como información para desprestigiar y desestabilizar algunos regímenes políticos progresistas como el de Venezuela del presidente Nicolás Maduro.