MADRID
EP/dpa
Hasta 2 mil 758 personas han muerto desde que comenzó 2019 en República Democrática del Congo, según las estadísticas de la ONG Médicos Sin Fronteras (MSF), que incluyen más de 145 mil infectados en este período.
A pesar de la magnitud de la epidemia, MSF lamenta una «alarmante» falta de fondos y de reacción de instituciones para responder a esta crisis. En concreto, denuncia que solo se han recaudado 2.5 millones de los 8.9 millones de dólares necesarios para el plan de respuesta y compara la situación con la del ébola que afecta al este de RDC, donde trabajan «múltiples organizaciones» y se han destinado «cientos de millones de dólares».
MSF ha advertido de que sin una respuesta mayor en financiación y organizaciones implicadas, la epidemia se agravará. «Dos meses después de la declaración oficial y pocas semanas antes del inicio del curso escolar no hay síntomas de que la epidemia de sarampión vaya a remitir. De hecho, desde julio ha empeorado con un incremento de los casos en varias provincias», ha explicado la directora de la misión de MSF en RDC, Karel Janssens.
MSF recuerda que la enfermedad no tiene cura, por lo que el único medio para combatirla es la vacunación y los cuidados para fomentar que el propio paciente la supere con sus defensas naturales.
El pasado 10 de junio se declaró formalmente la epidemia de sarampión en RDC y desde julio la situación ha empeorado con un aumento de los casos en varias provincias del país africano.
MSF cuenta con presencia en trece de las provincias congoleñas para combatir el sarampión en coordinación con el Ministerio de Sanidad congoleño, lo que ha permitido vacunar a 474 mil 860 menores de entre seis meses y cinco años de edad desde que comenzó 2019. Además ha prestado asistencia sanitaria a 27 mil 440 pacientes.
«Simplemente llevar las vacunas a los lugares en los que los niños las necesitan es una tarea muy dura. Hay que respetar la cadena de frío con neveras, generadores, combustible y un transporte rápido», ha destacado el coordinador de los equipos de emergencia para el sarampión de MSF, Pierre Van Heddegem, en un comunicado de la organización.