Walter Juárez Estrada

Negros nubarrones ensombrecen la segunda ronda electoral del 11 de agosto, será responsable el votante que tiene dos opciones para decidir el futuro de Guatemala; el Tribunal Supremo Electoral debe despejar las dudas de las elecciones del l6 de junio, cuestionado por las irregularidades que se dieron y no se ha responsabilizado a los simpatizantes de Sandra Torres, por la compra de votos, los incidentes en varios municipios al adversar la reelección y elección de alcaldes, cooptados por narcos y diputados corruptos.

Se repetirán las elecciones municipales en cuatro municipios por manipuleo y robo de papeletas. La OEA insta a la población a respetar la autoridad del TSE, cuyos magistrados tienen abierto antejuicio en análisis, dándose por anticipado que será rechazado “In límine” por no haber certeza que hayan cometido ilícitos en las desordenadas elecciones de junio. La fiscalía de Asuntos Electorales del MP, recibió más de 1 mil 550 denuncias de los incidentes en la primera ronda electoral.

El exencargado de cómputo del TSE, Gustavo Castillo, podría declarar como “testigo eficaz”, si le imputan responsabilidad en los errores que se dieron en la primera vuelta y dar lugar a abrir proceso penal, contra altos funcionarios del ente electoral; el fiscal Rafael Curruchiche y promover proceso contra los causantes de los incidentes en los comicios de junio y anular la adjudicación de los nuevos diputados y ediles por las irregularidades que se dieron en el evento, si se demuestra coacción con los electores.

Los candidatos Torres y Giammattei, en un proceso “entre luces y sombras”, no convencen a los indecisos, sospechan que no cumplirán los ofrecimientos, dan por hecho que el proceso se judicializará, ambos se hacen inculpaciones y los perdedores de junio, denuncian que se anticipó la adjudicación de los nuevos legisladores y alcaldes, cuando las elecciones se debieron repetir en los lugares donde hubo incidentes.

El TSE dice que es respetuoso del Estado de Derecho, en riposta al amparo que otorgó la CSJ por los errores que hubo en la tabulación de los votos, que alteraron los resultados, para favorecer a Torres, que se divorció por sus ambiciones políticas ,manipular a los órganos del estado, evitar su encausamiento por financiamiento ilícito y otros hechos punibles.

En los últimos procesos electorales han habido dudas sobre la idoneidad de las autoridades electorales y de los aspirantes a puestos de elección popular; las elecciones de junio, marcaron un norte para dudar si los votos de los l9 aspirantes a la Presidencia con la participación de 27 partidos fueron legítimos, si hubo manipuleo para inflar los resultados. La decisión la tiene el ciudadano que decidirá el futuro de Guatemala, que se debate en un Acuerdo espurio para recibir una avalancha de migrantes, que no son aceptados por Trump, que forzó a Morales, a firmar un Acuerdo de un “Tercer País Seguro”, cuando Guatemala, no está en condiciones para recibir a extranjeros, la mayoría con antecedentes pésimos.

Cartas del Lector

post author
Artículo anteriorLa toma de sus instalaciones: Una nueva oportunidad para el cambio de la Usac
Artículo siguienteEl interés nacional