Por ALAN FRAM
WASHINGTON
Agencia (AP)
El Congreso podría necesitar extender la crucial capacidad de endeudamiento del gobierno antes de las vacaciones legislativas de agosto, dijeron funcionarios de la Casa Blanca.
Ese plazo pondría una presión extraordinaria a los congresistas para que alcancen un acuerdo sobre una medida que suele requerir negociaciones largas y políticamente delicadas.
El secretario del Tesoro Steven Mnuchin emitió sus declaraciones dos días después de que el Centro de Política Bipartidista, una organización investigadora de centro, pronosticara que el gobierno podría quedarse sin recursos a principios de septiembre debido a una recaudación fiscal federal menor a la prevista. Si el Congreso no le aumenta el límite del endeudamiento, el gobierno podría incurrir en un cese de pagos sin precedentes que, a decir de muchos, podría perjudicar a la economía.
“Eso es algo de lo que estamos hablando, actualizando las cifras y viendo la posible necesidad de hacer algo antes de que todos se vayan” al receso veraniego, dijo Mnuchin a la prensa.
El secretario del Tesoro hizo sus declaraciones después de que él y otros altos funcionarios de la Casa Blanca se reunieran durante una hora con el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, y con Kevin McCarthy, líder de la minoría en la Cámara de Representantes, ambos republicanos.
Una votación para ampliar la capacidad de endeudamiento del gobierno es dolorosa para muchos legisladores, en especial los republicanos, porque muchos electores consideran incorrectamente que la medida es una causa de los enormes déficits federales, y no un resultado de éstos.
Por ese motivo, los dirigentes partidistas prefieren acompañar los aumentos al endeudamiento con disposiciones más atractivas.
Este año, los principales republicanos y demócratas confían en incluir aumentos a los topes de los gastos de defensa e internos que el Congreso impuso hace años y que ahora son considerados demasiado rigurosos.
Las conversaciones sobre esos límites a los gastos distan de haber concluido y parece posible que duren por lo menos hasta el 1 de octubre, cuando comienza el nuevo año fiscal. Será necesario que el acuerdo sea bipartidista porque tendría que ser aprobado en la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, y en el Senado, controlado por los republicanos, y luego pasaría al presidente Donald Trump para su firma.
La Cámara de Representantes se irá de receso el 26 de julio y el Senado el 2 de agosto.
Mnuchin y la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, tienen previsto examinar el jueves el límite del endeudamiento y los topes al gasto.