Julio Roberto Bermejo González*
Después de las promesas de ¡No soy ni corrupto, ni ladrón! Usted, –consciente o inconscientemente– ha entrado a una etapa de su gobierno inexplicable para usted, pero la ciudadanía ha sentido y está sintiendo un profundo deterioro en su nivel de vida, en su economía y en su desarrollo humano, ¿cuáles cree usted que son las causas de esta situación? Son varias las situaciones que se han creado y la responsabilidad de ello está en sus manos. Traiga a su memoria algunas situaciones en las que usted tenía que haber intervenido eficientemente y no lo hizo. Enumeremos algunas:
1) El combate a la corrupción era prioritario. Recordemos que usted fue electo como consecuencia de que a los demás candidatos se les identificaba con la corrupción y usted se presentó como un candidato anodino, sin experiencia y se presentaba como ¡ni corrupto ni ladrón! y el pueblo bajo una desesperación profunda, le creyó y votó por usted. De entrada usted ignoró el clamor popular y empezó a codearse con gente descalificada.
2) La gente que usted llevó al Congreso de la República –amparada en esa farsa de la planilla única– dejaba dudas sobre la competencia y honorabilidad de sus integrantes; muchos de ellos han resultado vinculados a hechos criminales. Para fortalecer la débil presencia de su equipo en el Congreso –partido FCN-NACIÓN–, y aceptó la incorporación al Partido de elementos conocidos como políticos nefastos y corruptos provenientes de los partidos cancelados –PP y Lider– y así se integró el «Pacto de Corruptos» que se está destacando por querer quebrar la lucha contra la corrupción impulsada por el Ministerio Público y la CICIG, por hacer desaparecer las mínimas conquistas legislativas que se habían logrado en 2016 para evitar el transfuguismo y el financiamiento ilícito a los partidos políticos.
3) Uno de los grandes problemas que tiene la administración pública es la burocracia excesiva y las plazas fantasma. Este problema usted lo reconoció en su campaña para aspirar al cargo, lo que suponía preparar con urgencia una nueva Ley del Servicio Civil y usted ha ignorado este problema y por el contrario ha estimulado y se ha hecho cómplice en la creación de plazas fantasma y en la adjudicación de plazas a personas no calificadas para el puesto asignándose las plazas a parientes y amigos. La prensa ha evidenciado esto y de parte del Presidente se ha ignorado el problema.
4) Otro problema tiene que ver con los abusos e impertinencias de los sindicatos y para muestra el de los maestros, el del Congreso, el de Salud Pública, etc. y usted ha sido complaciente y timorato con este problema y principalmente ese amiguismo y complacencia con Joviel Acevedo; a este sindicato se le abrieron las puertas del presupuesto y se le está regateando a los profesionales de la salud.
5) El deterioro del medio ambiente y la contaminación de los ríos es otro hecho importante que afecta el equilibrio ecológico y la salud de grandes comunidades de población –la gente pobre rural– y la respuesta de su gobierno ha sido encubrir los hechos, perseguir y criminalizar a los que protestan y levantar la alarma de que tales justas reacciones están afectando la inversión y el desarrollo del país, cuando en realidad es la inseguridad, la corrupción y la impunidad lo que está afectando el desarrollo. Su acción ha sido tratar de expulsar del país a aquellos que luchan contra la corrupción y la impunidad como el caso del Jefe de la CICIG y el Embajador de Suecia, lo cual pone de manifiesto un mal manejo de las relaciones internacionales, a lo cual se suma el traspiés en el caso Belice, el traslado equivocado de la embajada a Jerusalén y el mal manejo del problema de la comunidad guatemalteca en Estados Unidos de América.
6) Se le han comprobado la comisión de varios delitos y otros de tipo sexual que están pendientes que se le comprueben y su actitud ha sido negar algunas –aunque ya hay evidencias– y apoyar a los diputados corruptos que han impedido que se le levante el antejuicio. La corrupción personal también lo ha alcanzado al haber aceptado esa absurda bonificación mensual de Q50 mil que le asignó el Ejercito. El haber devuelto lo de varios meses no le quita la mancha.
7) Cuando se dio el fenómeno de la erupción del Volcán de Fuego usted inmediatamente dijo que «no había ni un centavo para ayudar a esa emergencia» lo cual frustró a la población y no era cierto, pero lo más grave es que la ayuda que después se ofreció no se ha cumplido debidamente; pero sí se sabe que ha hecho 36 viajes y en viáticos a percibido más de un millón de quetzales, lo cual llora sangre porque con ello está evidenciándose que hay ignorancia e insensibilidad hacia los grandes problemas sociales del país que demandan pronta solución, porque ese dinero pudo haber tenido un mejor destino.
8) Guatemala es un país pobre con muchos problemas que demandan solución inmediata e ignorando lo anterior usted se ha asignado un sueldo de más de Q140 más viáticos, lo cual es injusto e ingrato frente a las carencias de importantes sectores de la población.
9) Es lamentable que el CACIF indirectamente le apoye señalando que respalda la lucha contra la corrupción, sabiendo que muchos de sus miembros –unos han confesado y otros están siendo investigados y procesados– se han aprovechado evadiendo impuestos, introduciendo mercadería en contrabando y algunos participando en el lucrativo negocio de tráfico de drogas. Las pistas de aterrizaje clandestinas en algunas fincas dan evidencia de esto. En algunos de estos casos el gobierno no captura ni investiga, y todo esto, es un signo de participación en el «Pacto de Corruptos», evidenciando que el Estado está cooptado.
10) Hay muchas otras situaciones en las que usted ha tenido participación, que evidencian compadrazgos y complicidad, tal como la famosa reunión en la finca de Mario Estrada, antes de la captura de éste en Miami y la humillante y absurda actitud de trasladar la Embajada de Guatemala a Jerusalén, sabiendo que con ello se afecta el derecho histórico de Palestina, confrontando además a la ONU. Sirva todo lo expuesto para destacar que Guatemala atraviesa por una situación crítica en lo económico, político y humanitario, en la que el presidente Jimmy Morales debió haber tenido una atención y preocupación especial el desastre derivado de la erupción del Volcán de Fuego es otro ejemplo de ello– y no obstante se ha manifestado inaceptable indiferencia.
La lucha contra la corrupción no es ideológica, como lo ha pretendido calificar el gobierno y un poderoso sector empresarial neoliberal, cuando en realidad los problemas que afectan al guatemalteco son la falta de empleo digno, la pobreza, la corrupción, la impunidad y la inseguridad, temas sobre los cuales el Presidente ha estado ausente. El pueblo de Guatemala espera con ansiedad que llegue el 14 de enero de 2020, aunque los vientos avizoran incertidumbre. Únicamente podrá desvanecerse el panorama si cada guatemalteco vota con responsabilidad y convencimiento del peligro que representan algunos candidatos carentes de idoneidad.
* Doctor en Derecho Catedrático Universitario, Graduado por la Escuela Diplomática de España.