Por ANNA JEAN KAISER
RÍO DE JANEIRO
Agencia (AP)
El gigante tabacalero Philip Morris indicó que los tribunales de Brasil han dictaminado reiteradamente que las compañías de tabaco no son responsables de los daños a la salud relacionados con el tabaquismo, luego que la fiscalía del país interpuso una demanda para recuperar el dinero que el sistema de salud pública invierte para atender dichos padecimientos.
La querella presentada en contra de British American Tobacco y Philip Morris International pretende recuperar el dinero gastado en los últimos cinco años en el tratamiento de 26 padecimientos que tienen una relación directa, científicamente comprobada, con el tabaquismo. Se trata de la primera denuncia de este tipo en Latinoamérica.
Señaló que no había sido notificada de la demanda, por lo que no podía comentar sobre acusaciones específicas.
Un portavoz de British American Tobacco dijo que la compañía estaba al tanto de la querella, pero que aún no recibía una notificación legal, por lo que no podía comentar al respecto.
En la demanda, la fiscalía dijo que Philip Morris, British American Tobacco y sus filiales son responsables del 90% de la producción y venta de cigarrillos en Brasil. El Ministerio de Salud estima que el país pierde el equivalente a 3,500 millones de dólares al año en gastos médicos y disminución en la productividad debido a la adicción a la nicotina.
La organización Campaign for Tobacco-Free Kids, con sede en Estados Unidos, dijo que el caso de Brasil era “histórico” y que la fiscalía está “enfrentándose valientemente a las compañías tabacaleras multinacionales en busca de una compensación justa que el pueblo brasileño merece”.
Alrededor de 428 personas mueren al día en Brasil por la dependencia a la nicotina, y el 90% de los casos de cáncer de pulmón en el país están relacionados con el consumo de tabaco, de acuerdo con el Ministerio de Salud.
Brasil es considerado un líder regional en el control del tabaquismo.
Fumar es ilegal en casi todos los lugares públicos cerrados, la publicidad y las promociones para los productos de tabaco están prohibidas, y las cajetillas de cigarros contienen advertencias sanitarias gráficas de pulmones y bocas afectados por el cáncer.
La fiscalía señaló en un comunicado que el caso no pretendía afectar la producción de tabaco en Brasil.
Demandas similares interpuestas en Estados Unidos y Canadá han forzado a las compañías tabacaleras a pagar miles de millones de dólares por daños a la salud.