Por Cristian Velix
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Luego de que el juez Mynor Moto, presidente de la Asociación de Jueces y Magistrados del Organismo Judicial, confirmara que el titular del Juzgado Décimo de Instancia Penal, Víctor Cruz, tenía a su disposición un vehículo blindado otorgado luego de un acercamiento desde el Ministerio de Gobernación (Mingob), el analista independiente, Renzo Rosal, opinó que el togado opera políticamente.
Al consultarle sobre este tema, Rosal manifestó que el hecho de que Cruz cuente con seguridad de la Policía e inclusive con un vehículo blindado de la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad (SAAS), indica que tiene nexos evidentes con el Ejecutivo.
“Sobre este juez hay una serie de cuestionamientos y fundamentalmente por su parcialidad, por su falta de independencia y porque sus resoluciones, probablemente, le estén haciendo el juego a ciertos sectores de poder”, expresó Rosal.
Para el politólogo, la seguridad otorgada a Cruz no se justifica, ni tampoco la de otros jueces que ostentan, en palabras del entrevistado, de este tipo de “privilegios”.
Asimismo, agregó que los beneficios de seguridad no son porque estén en riesgo, sino porque “se han convertido en operadores de estructuras, en operadores al servicio de cierto tipo de agendas, y, por lo tanto, parte de los premios, parte de los incentivos que tienen por eso, es el tener seguridad, vehículos y demás”.
De esa forma, comentó Rosal, se denota que el principio de independencia judicial no lo posee Cruz, a lo cual añadió que los beneficios dados al juez son “intensivos por los servicios que él presta, desde su judicatura, pero operando políticamente”.
“Recordemos que la Policía Nacional Civil (PNC) le ha prestado seguridad del mismo tipo a personajes absolutamente oscuros del país como Mario Estrada y otros candidatos que usan seguridad otorgada por la PNC, en ningún caso por merecerlo, si no otra vez, por pseudoanálisis que no tienen ninguna validez”, afirmó el entrevistado.
Para finalizar, Rosal indicó que hay un nivel de preocupación debido a que se está manejando que Thelma Aldana y Gustavo Bonilla podrían amenazar o poder afectar la seguridad del juez. “Ni Thelma Aldana ni Gustavo Bonilla, creo yo, tienen pensamientos, ni responden a estructuras criminales como para poner en riesgo la seguridad de un juez que supuestamente ha resuelto en contra de ellos”, puntualizó Rosal.