Raymond J. Wennier
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Al fin del año pasado el Ministerio de Educación y la Presidencia de la República hicieron alarde de los números efectivos de días de clases, anunciando 180 al año. Sin embargo, en el Reglamento de la Ley de Educación Nacional, del 7-11-77, en el Artículo 58, dice: “El período lectivo consta de diez meses de actividades docentes, con un mínimo de 180 días efectivos de clases”.
En casi cuarenta y dos años, cuesta creer que este Mineduc es el primero en lograr cumplir 180 días efectivos de clases. Recuerdo que la licenciada Eugenia de Putzeys, maestra, licenciada en Psicología y Maestrías en Medición y Evaluación y en Administración Educativa, siendo Ministra de Educación en 1984, dirigía discusiones alrededor de los 180 días y aumentarlos a 200; además, lograr la educación bilingüe mediante la enseñanza en las lenguas quiché, mam, poqomam y kekchí para que los niños aprendieran su cultura, en su idioma y reducir la repetición escolar en los primeros grados de primaria.
Las noticias de hace varias semanas decían que faltaban tres maestros en una escuela en Escuintla cuando pasaban ya más de diez días de iniciado el ciclo escolar 2019. Quiere decir que esos alumnos recibirán, si no hay otra interrupción, 170 días de clases. Pero, si los alumnos asisten a la escuela sin recibir clases, ¿cuentan esos días como haber tenido clases los 180 días?
Aulas no habitables y alumnos recibiendo clases no formales en espacios educativos inadecuados, ¿cuentan como días hábiles?
Las clases, mayoritariamente, se imparten en español y no en un idioma indígena local. ¿Es eficiente la educación aunque asistan a la escuela y entiendan la mitad de lo expuesto?
La Hora, del 28-1-19, publicó comentarios del Ministro de Educación dando las siguientes cifras: En 2018, hubo 3,032.000 alumnos inscritos para ese año escolar. “Mineduc ha inscrito 2.6 millones de estudiantes en lo que va de 2019”. Hay una diferencia negativa de 432 mil estudiantes. Sin embargo, el Ministro espera que aún se inscriban alumnos para superar a 2018 llegando a 3,100.000 inscritos en los tres niveles educativos. Significan 500 mil nuevos alumnos inscritos un mes más tarde que al inicio de clases y pueden perder veinte días de clases. Esos alumnos asistirán 160 días.
El 31-1-19, el magisterio nacional realizó una manifestación con maestros de departamentos y de la capital. Lo que viene al caso es que ese día los alumnos no recibieron clases; además, al convocar para día jueves, es probable que no hayan tenido clases el miércoles por necesitar los maestros arreglar su movilización. Igualmente, algunos maestros viajaron de vuelta a sus lugares el viernes, lo que suma tres días que los alumnos no tuvieron clases.
Estos días sin clases, fue en el mes de enero. ¿Cómo será el resto del año?
La estadística se basa en fórmulas numéricas y en esta situación se habla de PROMEDIO de días escolares. Sería interesante saber qué escuelas y qué alumnos son considerados para establecer ese PROMEDIO.
¿Qué es lo que realmente es importante?
