POR ROB GILLIES/AP
TORONTO
Canadá abandonó ayer su prudencia diplomática y exigió formalmente a China que ponga en libertad a dos canadienses que fueron detenidos al parecer en represalia por el arresto de una alta ejecutiva china en territorio canadiense.
Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Europea emitieron declaraciones de apoyo a Canadá.
“Nos preocupa profundamente la detención arbitraria que las autoridades chinas hicieron de dos canadienses este mes y solicitamos que los dejen en libertad de inmediato”, dijo la canciller canadiense, Chrystia Freeland.
Un alto funcionario dijo que el Embajador de China en Canadá fue citado ayer y se le comunicó la exigencia canadiense. El funcionario solicitó el anonimato porque carecía de autorización para discutir el tema públicamente.
Meng Wanzhou, directora financiera de Huawei, fue arrestada en Canadá el 1 de diciembre a solicitud de Estados Unidos, que pidió su extradición para que enfrente cargos de que ella y su compañía engañaron a bancos sobre sus negocios en Irán.
Nueve días después, China detuvo al exdiplomático canadiense Michael Kovrig y al empresario canadiense Michael Spavor por “efectuar actividades que ponen en peligro la seguridad nacional”.
Freeland dijo que Canadá está cumpliendo el tratado de extradición con Estados Unidos y afirmó que efectúa un proceso justo y transparente en relación con Meng.
