De acuerdo con el informe, “Migración, desplazamiento y educación: construir puentes, no muros”, presentado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés), cada vez hay más migrantes menores de edad no acompañados en los centros de detención y en los que no cuentan con acceso a educación adecuada a sus necesidades.

Por Grecia Ortíz
gortiz@lahora.com.gt

Asimismo, el estudio destaca la importancia de las remesas y su contribución a la educación en países como Guatemala.

Según el informe, solo con el número de niños migrantes y refugiados en edad escolar, se estima que se podría llenar medio millón de aulas, lo que significa un aumento del 26 por ciento desde el año 2000.

El documento destaca las deficiencias y logros de los países al garantizar el derecho de los niños migrantes y refugiados a beneficiarse de una educación de calidad y al mismo tiempo, refiere que cada vez hay más menores no acompañados en los centros de detención, donde por lo general no cuentan con acceso a educación.

“Cerca de 50 mil niños de El Salvador, Guatemala, Honduras y México fueron detenidos cada año en promedio en la frontera de los Estados Unidos entre 2013 y 2017. En los Estados Unidos, los profesionales de la salud mental y la pediatría que visitan centros de detención familiares indicaron que los servicios de educación no eran adecuados”, destaca la UNESCO en el documento.

REMESAS DESTACAN POR SU APORTE A LA EDUCACIÓN EN GUATEMALA

Por otro lado, afirman que según las visitas efectuadas por profesionales de la salud mental y pediatría, se estableció que estos lugares no cuentan con los servicios de educación necesarios y como ejemplo citan que en México más de la mitad de los niños no acompañados han permanecido en centros de detención sin educación organizada.

Asimismo, las estimaciones señalan que 1 de cada 12 profesionales mejor calificados de América Latina, están emigrando a otros países.

El estudio también resalta el aporte positivo de las remesas enviadas por los migrantes a sus país, pues se considera que estas aumentaron el gastos de educación en América Latina en un 53 por ciento, llegando a un 66 por ciento en Guatemala y Lima en comparación con un 35 por ciento de países de ingresos bajos y medios.

El informe del Seguimiento a la Educación en el Mundo de la UNESCO, también aboga porque los costos en transacción para el envío de remesas al país de origen sea reducido al objetivo del 3 por ciento, en lugar del promedio actual que alcanza a un 7.1 por ciento, pues con ello podría aumentar el gasto en educación del mundo en unos mil millones de dólares al año.

Al respecto la investigadora social Sofía Matheu, destacó la necesidad de un abordaje integral para la atención de la población migrante, no solo a nivel laboral, sino también en la salud y educación como otros factores relevantes.

Para la directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay, el aprendizaje no es un lujo, y cuando se niega la educación a migrantes y refugiados, todos pierden.

“La educación es clave para la inclusión y la cohesión y la mejor forma de forjar comunidades más fuertes y resilientes”, explicó.

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